En agosto se ha incrementado el dolo y la saña de los gatilleros hacia los ejecutados en la ciudad, predominando las victimas calcinadas en su totalidad no sin antes haber sido golpeadas y torturadas.
La crueldad ha sido extrema en muchos de los casos, por lo que el fiscal de la Zona Norte, Jorge Nava, recalcó que en gran medida se trata de una descomposición social, los mensajes ocultos entre grupos delictivos salen a relucir en estos hechos por demás violentos.
Obedece a los mensajes intimidatorios que pretenden enviarse entre los diferentes grupos delincuenciales y a una parte de la descomposición del tejido social que existe, esas personas que se atreven no solo a los homicidios, sino que van más allá como las decapitaciones, los desmembramientos y hasta quemarlos, tiene la finalidad de crear el terror entre las bandas rivales, mencionó.
Dentro del ordenamiento legal existe el homicidio, pero dentro de éste hay algunas circunstancias modificatorias de la pena, como son las agravantes y calificativas que se han estado resaltando para dar a conocer y tratar de sensibilizar a las personas que cometen este tipo de delitos y se pueda crear conciencia de lo que están haciendo y sus consecuencias.
En este tipo de casos el Código Penal del Estado contempla la pena vitalicia para quienes comenten tres homicidios en uno o en diferentes hechos y la retribución, porque se está viendo que les pagan a los jóvenes por participar en estos hechos.