Inicio Perspectiva ¿Votar o no votar este domingo?

¿Votar o no votar este domingo?

Mario Alvarez.- Este domingo se juega más que una elección: se pone a prueba nuestra dignidad ciudadana. Y aunque muchos lo quieran disfrazar de “fiesta democrática”, la realidad en las calles es otra. Ahí están los famosos “acordeones” —esas hojitas donde ya te dicen cómo votar— repartiéndose como si el pensamiento crítico fuera estorbo. Y lo más grave: hasta a la presidenta misma se le salió decir que “llevaran su acordeón”. Así, sin vergüenza, como si estuviera bien.

Como licenciado en Educación, egresado de la UACJ, me resulta indignante ver cómo se normaliza lo que debería avergonzarnos. Nos educamos para formar ciudadanos libres, autónomos, pensantes. Pero el mensaje desde arriba es otro: “tú sólo sigue instrucciones, no cuestiones, no decidas”.

Sí, hay corrupción. Sí, hay manipulación. Sí, hay compra de votos, amenazas, acarreo y simulación. Pero eso no es excusa para rendirnos. Al contrario: es precisamente por eso que tenemos que votar. No para legitimar a los tramposos, sino para demostrar que no todos estamos en venta. Que hay quienes aún creemos en la conciencia, no en los sobres.

Muchos dicen: “yo no voto porque nada cambia”. Pero no votar no es neutral. No votar es dejarle el país a los que sí se organizan, a los que sí llenan camiones, a los que sí reparten acordeones. Ellos sí votan y lo hacen en bloque. Si nosotros nos cruzamos de brazos, el resultado ya está escrito.

Yo sí voy a votar. No porque confíe ciegamente en los candidatos, sino porque me niego a que decidan por mí. Porque quiero que mi voto sea una molestia para el sistema que se alimenta del conformismo. Porque educar también es resistir. Y resistir, en estos tiempos, empieza por ir a las urnas.

Este domingo, más que un voto, es un acto de dignidad. Que no nos ganen los que compran conciencias. Que no nos calle el miedo. Votemos, aunque sea con rabia. Pero votemos.