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KANSAS CITY — Con miras a la temporada 2020, en la cual esperan revalidar su título, los Jefes de Kansas City, actuales campeones de la NFL, retuvieron al esquinero Bashaud Breeland bajo un contrato de un año y 4.5 millones de dólares.
Breeland llegó a los Jefes en el 2019, en un acuerdo por una temporada, siendo uno de los principales esquineros del equipo; jugó los 16 partidos de la campaña regular, en los cuales registró 37 tacleadas, defendió ocho pases y tuvo dos intercepciones.
Luego de la salida del esquinero Kendall Fuller, los de Andy Reid decidieron apostar por Breeland para cubrir su ausencia y formar pareja con Chavarius Ward.
Después de conquistar el Súper Tazón LIV, el jugador de 28 años regresa con los Chiefs para su segundo torneo, luego de estar con los Empacadores de Green Bay en 2018, y Pieles Rojas de Washington de la temporada 2014 a la 2017.
Aunado a la firma del egresado de la Universidad de Clemson, los actuales monarcas de la liga llegaron a un acuerdo con el ala cerrada, Ricky Seals-Jones, procedente de los Cafés de Cleveland, quien realizó 14 atrapadas para 229 yardas y cuatro anotaciones en 2019.
Los Jefes de Kansas City han permanecido con un bajo perfil durante esta temporada baja de la NFL, con pocas contrataciones, además de que han perdido algunas piezas defensivas claves, pues además de Fuller, también se fue el apoyador Reggie Ragland a Leones de Detroit.
En cambio, también retuvieron a los receptores abiertos DeMarcus Robinson y Sammy Watkins, por lo que seguirán siendo objetivos importantes para el mariscal de campo Pat Mahomes, junto al ala cerrada estelar Travis Kelce. En tanto, el liniero defensivo Chris Jones recibió la etiqueta de jugador franquicia.
