Chihuahua.- Los diez gobernadores que integran la Alianza Federalista urgieron al presidente Andrés Manuel López Obrador, a diseñar una estrategia nacional eficaz, incluyente y cooperativa para la aplicación de la vacuna contra COVID-19, toda vez que no aceptarán que la población en los estados deba esperar hasta 18 meses para recibir la dosis.
“Déjese ayudar”, le pidieron al Presidente los mandatarios en la carta que fue firmada por el gobernador de Chihuahua, Javier Corral y sus homólogos de los diez estados que integran la Alianza, quienes se reunieron en Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Los gobernadores señalan no compartir la decisión unilateral del Gobierno Federal para centralizar la compra y distribución de la vacuna, no obstante, reiteran su disposición a coordinar sus capacidades para garantizar su acceso universal y no discriminatorio.
“Exigimos se convoque a la brevedad al Consejo de Salubridad General, autoridad constitucional máxima para normar, coordinar y ejecutar las acciones pertinentes para superar una enfermedad de esta naturaleza”, destaca el posicionamiento.
El texto fue leído en conferencia de prensa por el anfitrión Francisco García Cabeza de Vaca, después de celebrada la reunión plenaria.
“La vacuna es un tema que no admite descalificaciones y mucho menos, el vano y simplista recurso a la politiquería con el que usted responde a la genuina preocupación social, nadie pretende politizar la enfermedad y mucho menos su cura. A ninguno de nosotros esta pandemia cayó como anillo al dedo, para afianzar un proyecto político personal o partidista”, indica la carta.
“Queremos simplemente saber qué nos toca hacer y cómo vamos a involucrar a la sociedad a que haga ésta su parte, queremos transparencia, información y reglas claras”, agrega.
García Cabeza de Vaca señaló que la inmunización es un reto sin precedentes y que hay vidas humanas en riesgo, por lo que en el propósito de salvarlas, no se vale sacar tajada de la angustia y desesperación de las personas.
El planteamiento, es que el Consejo establezca el cronograma, las fases por población objetivo de aplicación, los criterios de distribución y reparto, los protocolos para la conservación en frío, las medidas para prevenir la especulación, captura o uso clientelar o electoral de la vacuna, así como las formas y modalidades de participación de los gobiernos locales y el sector privado.
“En pocas palabras, que el Consejo en ejercicio de sus atribuciones, decida con transparencia y objetividad, cómo y cuándo llegará la vacuna a cada mexicano”, añadió el mandatario tamaulipeco.
“La ética y la ley exigen que nadie saque provecho de la cura a una enfermedad que nos ha marcado como generación, inmunizar a nuestra población es un deber público que no se debe subordinar jamás a intereses políticos o de coyuntura”, subrayó.
Los mandatarios aliancistas acordaron además implementar una serie de medidas en la víspera de la llegada de la vacuna a sus entidades.
El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, dijo que ante el riesgo de contagio que impera por las fiestas decembrinas, en las diez entidades se unificarán criterios para implementar medidas posteriores al 25 de diciembre y contener repuntes, de la mano y con el compromiso del sector productivo.
El gobernador Martín Orozco, de Aguascalientes, precisó que cada estado constituirá un Comité Estatal de Coordinación para la Vacunación, que tendrán como objetivos operar la logística del traslado de la vacuna desde los nodos del gobierno federal, el almacenamiento y la distribución desde los centros de vacunación.
Además implementarán un sistema de citas para definir en qué centro de vacunación corresponde a cada persona acudir a aplicarse la dosis, con la finalidad de estar preparados con un paso adelante, para cuando empiece la distribución.
A la reunión asistieron también los gobernadores Jaime Rodríguez Calderón, de Nuevo León; Enrique Alfaro, de Jalisco; Diego Sinhue Rodríguez, de Guanajuato; Miguel Riquelme, de Coahuila; José Ignacio Peralta, de Colima y una representación del gobernador de Durango, José Rosas Aispuro.
A CONTINUACIÓN EL TEXTO ÍNTEGRO DE LA CARTA:
Ciudad Victoria, Tamaulipas 16 de diciembre del 2020.
Licenciado Andrés Manuel López Obrador. Presidente de los Estados Unidos Mexicanos.
Presente:
Desde el inicio de la pandemia provocada por el covid-19, los estados unidos en la Alianza Federalista hemos desplegado el mayor de los esfuerzos para contener la expansión de los contactos. Cuidar la salud y la vida de las personas y aminorar el impacto económico y social de esta enfermedad.
El Gobierno Federal ha contado con nuestra plena disposición para hacer cumplir las disposiciones de las autoridades sanitarias.
Tomamos la iniciativa desde que se declaró la emergencia sanitaria y hemos asumido nuestra responsabilidad sin mezquindad, sesgos ideológicos o políticos.
En condiciones económicas y presupuestales adversas y en plena transición al Insabi, nuestros sistemas locales han ofrecido información, atención y cuidados a los ciudadanos. Incluso en sustitución de la misma federación.
La producción de la vacuna es una buena noticia para la humanidad. Nos permitirá superar esta crisis y recuperar gradualmente nuestra normalidad. Siempre y cuando su aplicación se realice en condiciones justas, equitativas y responsables.
La ética y la ley exigen que nadie saque provecho de la cura a una enfermedad que nos ha marcado como generación. Inmunizar a nuestra población es n deber público que no se debe subordinar jamás a intereses políticos.
El Gobierno Federal ha decidido de forma unilateral centralizar la compra y distribución de la vacuna. Aunque no compartimos la decisión, reiteramos nuestra disposición a coordinar todas nuestras capacidades para garantizar el acceso universal y no discriminatorio de la vacuna.
Pero lo que nunca aceptaremos, es que ni siquiera se nos informe con claridad cuándo y en qué condiciones tendremos acceso a la vacuna. La vacuna es un tema que no admite descalificaciones y, mucho menos, el vano y simplista recurso a la “politiquería” con el que usted responde a la genuina preocupación social.
Nadie pretende politizar la enfermedad y mucho menos su cura. A ninguno de nosotros esta pandemia cayó como anillo al dedo para afianzar un proyecto político personal o partidista. Queremos simplemente saber qué nos toca hacer y cómo vamos a involucrar a la sociedad a que haga ésta su parte.
Queremos transparencia, información y reglas claras. La inmunización es un reto sin precedentes. Hay vidas humanas en riesgo. No debemos unir el propósito de salvarlas. No se vale sacar tajada de la angustia y la desesperación de las personas.
No aceptamos que las personas de nuestros estados tengan que esperar más de 18 meses para ser vacunados.
Por tanto, urgimos a concertar una estrategia nacional eficaz, incluyente y cooperativa. Exigimos se convoque a la brevedad al Consejo de Salubridad General, autoridad constitucional máxima para normar, coordinar y ejecutar las acciones pertinentes para superar una enfermedad de esta naturaleza.
En particular, planteamos que dicho Consejo establezca el cronograma, las fases por población objetivo de aplicación, los criterios de distribución y reparto, los protocolos para la conservación en frío, las medidas para prevenir la especulación, captura o uso clientelar o electoral de la vacuna, así como las formas y modalidades de participación de los gobiernos locales y el sector privado.
En pocas palabras, que el Consejo, en ejercicio de sus atribuciones, decida con transparencia y objetividad cómo y cuándo llegará la vacuna a cada mexicano.
La salud es un derecho humano fundamental consagrado en la Constitución y que debe ser garantizado por el estado. Su protección debe ser propósito de unidad nacional.
Cuenta usted con los gobernadores de la Alianza Federalista. Señor Presidente, déjese ayudar.
Atentamente la Alianza Federalista.