Inicio LA OTRA NORMALIDAD Navidad diferente

Navidad diferente

Jorge Quintana Silveyra.- Hoy la grey cristiana celebra el nacimiento de Jesús, el hijo de Dios, y la comunidad mundial, en esta fecha especial, entrega sus esperanzas por un mundo mejor.

La emergencia sanitaria, que hoy sufre la humanidad, acabó con muchas vidas y puso en jaque las capacidades de los gobiernos para enfrentar catástrofes sanitarias. Al fin, después de casi un año, por fin vemos una luz al final del túnel, se inicia la aplicación de vacunas para proteger a la humanidad del virus, y todos tenemos la esperanza que esta vacuna detenga el crecimiento de la enfermedad.

Muchos retos han enfrentado los habitantes de La Tierra, en diversas épocas, y en todas la medicina ha salido victoriosa, esperamos, todos, que la enfermedad que hoy enfrentamos, se detenga pronto; pero, debemos estar preparados para los embates de los virus que cada día se empeñan en amenazar al género humano, y Dios quiera que tengamos la sabiduría y la capacidad científica y tecnológica para enfrentarlos.

Por hoy, por lo importante del día que vivimos, en que renovamos el amor al prójimo y Dios nos bendice con el nacimiento de su hijo, dediquemos nuestros esfuerzos en vivir con paz y armonía, dejando a un lado la división, la estigmatización y el odio a quienes no piensan como nosotros.

Pidamos al Señor que dote de paciencia, tolerancia, fortaleza, sentido común y sabiduría a los responsables de las diferentes esferas de gobierno, para que el año entrante sepan asumir con responsabilidad y mesura su mandato.

Démonos la oportunidad de ser y hacer felices a quienes nos rodean, a nuestros cariños más cercanos, hagamos de la concordia y del amor, una forma de pensar, de ser, de vivir.

Que el día de hoy sea el parteaguas de nuestras vidas para convertirnos en ejemplo de dignidad, de generosidad y sobre todo de calidad humana.

Este año que está a pocos días de terminar, se volverá en un recuerdo de lo que fuimos capaces de enfrentar como comunidad.

Todos los habitantes de este planeta debemos concientizarnos que se nos acaba el tiempo para cuidar de él, para regresarle su capacidad de restablecerse en su orden natural.

Así pues, son muchas las causas y los motivos por los que tenemos que vivir agradecidos, es mucho lo que hemos recibido, lo que hemos disfrutado, para estar permanentemente reconociendo a Dios y a la humanidad la oportunidad de estar en este mundo, de estar vivos.

A todos ¡Feliz Navidad!