Después de 19 años y para seguir clamando justicia, madres de mujeres desaparecidas y asesinadas autodenominadas Mujeres de Negro, volvieron a la cruz de clavos ubicada a la entrada del puente internacional Paso del Norte.
En la manifestación estuvo presente el papá de Esmeralda, José Luis Castillo, quien realizó consignas con el fin de que las autoridades investiguen los casos anteriores y los que se siguen presentando que no han tenido avances sustanciales.
Las manifestantes recorrieron varias calles de la ciudad y por la tarde llegaron a la avenida Juárez, donde está la cruz de clavos, lugar donde hicieron algunos pronunciamientos acerca de la violencia contra las mujeres y la poca atención en las investigaciones sobre feminicidios y la violencia contra la mujer.
Juárez Hoy
