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Los 40 años del sindicato de ICSA

Rafael González Garduño (*).- En medio de esta pandemia que parece decirnos quién habrá  de vivir y morir, debería hoy celebrarse el 40 aniversario de la fundación de los sindicatos de personal académico  de la Universidad  Autónoma  de Ciudad Juárez.

El 30 de mayo de 1980, en asamblea general constitutiva, se fundó el sindicato de carácter gremial denominado Asociación Profesional de Personal Académico del Instituto de Ciencias Sociales y Administración -APPAICSA-, cuyo objetivo  primordial  consistía  en la defensa, estudio y mejoramiento de las condiciones laborales del personal  académico.

Al recordar esta fecha memorable, no debemos olvidar a nuestro amigo Enrique Villarreal Macías, a quien la torpe muerte cegadora arrancó  desgraciadamente  de nuestro entorno.

Cuando en la agenda nacional de las universidades se debatía ya el punto del sindicalismo con la adición al artículo tercero de la Constitución de la República  que elevaba  al rango  constitucional  la autonomía  universitaria y definía el marco  jurídico laboral del personal académico, fue el Rector Enrique Villarreal quien sin perder el sentido de su auténtica misión de maestro universitario, entendió que había llegado el momento de fundar los sindicatos del personal académico de la universidad. Que nuestra universidad debería tener una presencia institucional para el logro de sus fines, fundándose así la APPAICSA, primer sindicato de profesores de personal académico.

Posteriormente, siguiendo las mismas directrices se constituyeron legalmente, la Asociación Gremial de personal académico de ICB (Agrepeac) y el sindicato de Ingeniería y Arquitectura (Spaiia).

Como consecuencia ineludible, los tres sindicatos actuando como uno solo, solicitamos al rector Villarreal la expedición del contrato ley, es decir, el contrato colectivo de trabajo, que normaría las condiciones laborales, firmándose al año siguiente, el 19 de marzo de 1981, acto que fue el punto de inicio de todos los beneficios obtenidos por los maestros académicos de la UACJ.

Nuestro reconocimiento a un gran hombre, un carismático rector que sentó las bases de esta Universidad plantada en el corazón y en la razón de esta dinámica ciudad fronteriza de México.

(*) Primer Secretario General de APPAICSA