WASHINGTON- Mientras Estados Unidos sigue avanzando en su programa nacional de vacunación, los estadounidenses en el extranjero, a quienes se exige pagar impuestos a Estados Unidos, se sienten abandonados por su propio Gobierno, informó el Washington Post.
Citando cifras oficiales, el reporte señaló que alrededor de nueve millones de estadounidenses viven actualmente fuera de Estados Unidos y que en las últimas semanas, “un número creciente de ellos ha argumentado que por lo tanto deberían tener derecho a recibir vacunas contra el Coronavirus aprobadas por Estados Unidos”.
Según el informe, a diferencia de los expatriados de otros países, a los expatriados de Estados Unidos se les exige pagar los impuestos de su país, pero su solicitud de “contar con una vacuna” fue rechazada por la Casa Blanca.
“Históricamente no hemos proporcionado atención médica privada a los estadounidenses que viven en el extranjero y esa sigue siendo nuestra política”, dijo la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, citada en el reporte.
Xinhua
