Javier Armendáriz Cortez.- Tengo ya algunos años de conocer a Diana Anabel Espinal Meza y siempre he admirado su trabajo, pero cuando nos conocimos en el Taller Literario Carlos Montemayor, yo no escribía para un periódico.
Esta poetisa de origen hondureño tiene un gran corazón para ayudar a todo tipo de estudiantes y colegas escritores, es una mujer que se supera actualizándose como maestra y como escritora. Es una poeta sensible, reflexiva y con un arte extraordinario para la metáfora poética.
Hoy decidimos empezar por mostrar un poco de su poesía y en nuestra siguiente entrega de Frontera Cultural les presentaremos la breve entrevista que le hicimos de manera virtual.
Del Poemario: ReiteraciÛn de Cornisas (2014)
57. L·zaro se levanta. (*)
Hoy hizo erupción un búfalo de fauces cuadradas
hoy pide ser amamantado el siglo XXI
enjambres de botas y un estado inaceptable
de trombas ofrendan trampas al tiempo
Hoy hizo erupción un búfalo de fauces cobrizas
en la cara llevaba un antifaz de cáncer que ahuyentaba
los reflejos las oportunidades la estación de los espejos.
Hoy pide ser amamantado el siglo XXI
se levantó Lázaro con su ropaje de hormigas
alguien saca sus viejas cuentas de vidrio molido
alguien coagula chillidos de bisagras
En la despensa del miedo hay hemorragias que violan sueños.
(*) Este poema tiene video en http://www.youtube.com/watch?v=R631vmXK4n8
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Del Poemario: Tras los hilos (2004)
1.
Despertá acariciando pergaminos de liquidámbar
regresá de ese precipicio de orquídeas que te acosan
permití, que limpie con mi lengua, el poniente del depósito de tus lágrimas, la lumbre de tu sonrisa, el pulso acelerado.
Perpetuemos grillos en las manchas de la luna
en cálidos despertares sabré provocar en ti,
aguas recién drogadas en nueces.
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Del Poemario: Eclipse de Agujas. (2000)
6.
Entre las fauces de un vuelo
apenas temblorosa intocable.
He yacido en cuartes menguantes que taladran pianos.
Temo resbalar por canales de papel mojado
y masticar cortinas de almendra.
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Del Poemario: Del ladrido del sombrero a la escama del sol. (2007)
1.
Esta impermeable soledad mulata
sabe a serenidad de esquina.
Todas las noches, bajo la boca del jarrón
se desploman purulencias de repetidas frases
en bultos de interminables sosiegos.
Anoche, tras el aurífero serpenteo disipado,
los árboles no podían explicar el ¿por qué?
Del oscurecido fuego y ni paños de ajo
con barro cocido pudieron encontrar nutrientes para blanquear agencias de viajes.
En lo más profundo del pavimento
Rechinan las líneas puntiagudas y cuatro ostiones se niegan a contar su verdad salada.
En esta mulata soledad impermeable cada caricia es un macaco de plata en un verde botella.
