Propietarios de bares y restaurantes comenzaron a proteger sus negocios a fin de evitar saqueos, porque muchos de éstos han tenido que cerrar por la contingencia del Covid-19.
Al hacer un recorrido por algunas zonas de la ciudad se pudo constatar que, en la avenida Manuel Gómez Morín, locatarios de una plaza comercial decidieron prepararse y proteger sus establecimientos.
En puertas y ventanas colocaron madera y candados a fin de evitar saqueos y vandalismo que e se pueden presentar.
La situación se agrava por la pandemia, por lo que empresarios tendrán que soportar 30 días más sin abrir.
La industria comienza a despedir gente y las contrataciones son nulas, por lo que se pueden dar casos de personas que en forma desesperada pueden delinquir o simplemente los que se dedican a estas actividades ilícitas.
Se espera que en los próximos días más negocios comiencen a replicar la medida, ante el panorama poco halagador de la recuperación económica que al parecer tardará más de lo debido.