BUENOS AIRES- Argentina enfrenta una ola de calor con temperaturas récord en varias provincias del país, lo que determinó a las autoridades a implementar medidas inéditas, como un pedido a las empresas para que consuman menos energía y destinar el excedente al uso de los hogares.
Además, se implementó el trabajo remoto para los empleados públicos del Gobierno nacional, mientras que ciudades como Buenos Aires, la capital del país, dispusieron la entrega gratuita de agua envasada a los residentes en distintos puntos, en una jornada de agobio que llevó a los vecinos a improvisar paseos recreativos en las aguas del Río de la Plata.
De acuerdo con datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la ciudad de Rivadavia, en la provincia de Salta, alcanzó los 45 grados centígrados; en San Antonio Oeste, en la provincia de Río Negro, el termómetro llegó a los 44 grados, mientras que en Buenos Aires la temperatura llegó a 36.1 grados.
En ese marco, la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, explicó que “el sistema eléctrico está recibiendo picos de demanda” y que ello se produce “por buenas razones, como es el crecimiento económico” y “por malas razones, como es la ola de calor y estas nuevas temperaturas que estamos viviendo en el mundo y en la Argentina en particular”.
La funcionaria dijo durante una conferencia de prensa que el Gobierno argentino dialogó con los grandes consumidores, como empresas e industrias, para favorecer el ahorro energético en momentos de alta demanda.
Además, anunció el teletrabajo para la Administración Pública Nacional durante el jueves y el viernes, a fin de evitar traslados y atenuar el consumo energético en la circunstancia.
Argentina registra desde el viernes 7 de enero temperaturas máximas elevadas, que rondan entre los 35 y 40 grados, y mínimas que rondan los 25, lo que provocó la emisión de alertas de distintos niveles en 18 de las 24 provincias del país, ya que las marcas térmicas pueden provocar efectos graves, moderados y leves en la salud de los residentes.
La ciudad de Buenos Aires, en tanto, instaló puestos de hidratación en distintos puntos, como el emblemático Obelisco, en calles altamente transitadas y en los centros de testeo y vacunación contra la COVID-19, a la vez que colocó gazebos en esos lugares para que la gente enfrente las altas temperaturas a la sombra.
Ante la ola de calor los residentes no dudaron en hacer uso de las instalaciones denominadas “BA Playa”, una propuesta de la alcaldía capitalina con arena de playa, sombrillas, reposeras, duchas, juegos de agua, inflables para niños de distintas edades, canchas de fútbol y de voleibol playero, y sectores de lectura.
Xinhua
