Diego Maradona fue operado el martes con éxito por un edema en la cabeza, en un nuevo episodio de su largo historial de problemas de salud que puso otra vez en vilo a la Argentina.
El legendario exfutbolista, de 60 años recién cumplidos, fue intervenido en la clínica privada Olivos, situada en la misma localidad al norte de Buenos Aires.
“Todo fue un éxito y se dio tal cual estaba previsto. Diego está en su habitación descansando”, informó un comunicado de la oficina de prensa de Maradona.
Fue el cierre de una larga jornada en la que Maradona amaneció en otro establecimiento médico en la ciudad de La Plata, 40 kilómetros al sur de la capital argentina, con un cuadro de deshidratación y anemia hasta que por la tarde del martes una tomografía de rutina detectó un hematoma subdural, que es la acumulación de sangre entre la membrana y el cerebro generalmente provocada por un golpe en la cabeza.
En estos casos, la cirugía consiste en practicar un pequeño orificio en el cráneo para drenar el líquido acumulado.
“La cirugía la hicimos junto a un equipo seleccionado de varios neurocirujanos de renombre, duró una hora y veinte. Se pudo evacuar el hematoma de manera exitosa”, detalló el médico personal de Maradona, Leopoldo Luque, a periodistas apostados frente a la clínica.
Rodeado por una decena de fanáticos del Diez, el médico adelantó que “los pasos a seguir es la observación, está controlado. Tiene un drenaje que se lo vamos a retirar mañana”.
