Fernando de Jesús Hernández Estrada .- Mucho se ha debatido, y se debate, acerca de la utilidad de las “Organizaciones de la Sociedad Civil” (OSC) o “No Gubernamentales” (ONG) en la actualidad. El tema, lejos de agotarse, se ha incrementado sobre todo cuando han emergido voces de colectivos que buscan respuestas a sus inquietudes, o demandas, y no se sienten representados en las instituciones oficiales. Como en toda polémica, existen grupos a favor, otros en contra y sectores que simplemente se mantienen neutros frente a esta discusión.
Algunas personas opinan que estas entidades están efectuando tareas propias de los gobiernos y por ello su razón de ser no es justificable. Pero, por el contrario, es una fehaciente expresión de que la democracia está funcionando correctamente cuando el aparato estatal posibilita y promueve que la sociedad civil se organice y participe de las acciones que le afectan. Lo anterior, permitiendo la pluralidad, además del surgimiento, de múltiples actores en escenarios sociales, económicos y culturales, entre otros; aunque no siempre estén bajo su control directo.
Al ser el Estado una organización política conformada por instituciones burocráticas estables, dentro de unos límites territoriales establecidos, debe asumir dimensiones en proporción a la población y extensión geográfica que ocupa. Esta estabilidad y tamaño con frecuencia significa que debe sacrificar la posibilidad de dar respuestas flexibles, rápidas, particulares y oportunas a los retos especiales que se le plantean.
Lo señalado, frente a la realidad que siempre es compleja, tiene múltiples manifestaciones y además se resiste a ser controlada; por lo que siempre desafiará cualquier intento que se haga por gobernarla. Con esto no se quiere decir que los aparatos estatales son ineficaces o injustificables, por el contrario, en las naciones modernas son necesarios; pero tienen limitantes, por lo que también requieren de apoyo.
De acuerdo a lo expuesto, las OSC y/u ONG se constituyen en aliados ideales para los entes gubernativos. Estas tienen mayor capacidad de maniobrabilidad frente a problemas puntuales o específicos (como quiera denominárseles). Asimismo, pueden asumir alcances desde lo local, hasta lo regional, nacional e incluso internacional.
También en cuanto a su temporalidad pueden variar del corto al mediano o largo plazo. Lo cierto es que son entes muy diversos en su naturaleza, extensión y duración, con gran facultad de adaptación frente a los desafíos.
Al ser México un país con una población cercana a los ciento treinta millones de habitantes, no es de extrañar que los requerimientos de la población para alcanzar calidad de vida sean muy numerosos e incluso disímiles. En efecto, es probable que lo que favorezca a un grupo A perjudique a un grupo B, aunque se comparta un mismo territorio, de manera que forzosamente deben focalizarse algunas políticas o abordarse ciertas situaciones con entidades específicas. Por ello, para el Estado Mexicano y sus múltiples formas de gobierno, es conveniente dar cabida, aliarse y apoyar a estos entes que suplen funciones que el Estado no puede cumplir.
En el estado de Chihuahua, Ciudad Juárez es un caso emblemático. Por ser un estado fronterizo y por sus características geográficas, evidencia conflictos y condiciones que no tienen réplica en otras zonas de esta patria.
De esta manera, se comprende el dinamismo que estas agrupaciones, filantrópicas y sin fines de lucro, han adquirido en la jurisdicción haciendo vida y luchando a diario por construir un asentamiento seguro, próspero y de oportunidades para todos.
En conclusión, es difícil pensar que entes que han tenido tanta resonancia en la colectividad no estén cumpliendo una o múltiples funciones en la escena social. De hecho, la diversidad de actividades que desempeñan indica que están dando soluciones a situaciones que no están siendo atendidas oportunamente por otras entidades con competencia en las problemáticas abordadas. Por ello, es amplia la perspectiva de existencia de estas asociaciones a futuro en contextos con regímenes no totalitarios. En tal sentido, se exhorta a los entes públicos y privados, así como a los pobladores en general, a apoyar la labor de estas organizaciones en su accionar pues tarde o temprano impactará en la existencia de todos en forma positiva.
Sumando Esfuerzos por Juárez A C
