Únicamente la Región Juárez que incluye 10 municipios de la zona norte del estado pasará al semáforo amarillo para la semana de hoy lunes 31 de agosto al domingo 6 de septiembre, informó el gobernador Javier Corral Jurado, en mensaje a los chihuahuenses.
La Región Juárez, con una ponderación en rango de 14 puntos (en el análisis de los 10 indicadores revisados por las autoridades de Salud) y un riesgo epidemiológico moderado, puede avanzar de manera gradual en el Plan de Reapertura Estatal para las actividades económicas, recreativas, sociales y culturales.
Junto con Juárez, la región fronteriza se integra por Ahumada, Ascensión, Buenaventura, Casas Grandes, Galeana, Guadalupe, Janos, Nuevo Casas Grandes y Práxedis G. Guerrero.
La Región Chihuahua, con los 57 municipios restantes, presenta todavía un riesgo epidemiológico alto, con 18 puntos en la ponderación de los indicadores, por lo que se mantendrá en color naranja.
El mandatario estatal destacó que hoy debemos actuar con más cautela, para avanzar de manera segura y sostenida hacia nuestra nueva realidad, por lo que es necesario acatar las indicaciones emitidas por las autoridades, que serán readecuadas al comportamiento y dinamismo de la pandemia en las diferentes regiones.
Anunció que atendiendo el conjunto de los indicadores del semáforo de riesgo epidemiológico, se han generado varios cambios al Acuerdo 102/2020 del 9 de agosto, que serán publicados este lunes 31 en el Periódico Oficial del Estado, con nuevos criterios que se deberán seguir en la reapertura paulatina de actividades.
“Son precisiones en cuanto al porcentaje de aforo, según los cupos y tipo de instalaciones en los distintos templos de las diversas Iglesias y Asociaciones religiosas que tienen presencia en nuestro estado, así como a los salones de eventos, en términos de su superficie instalada. También modificaciones al semáforo, para que bajo un estricto control sanitario, aprobado por el Consejo Estatal de Salud, las distintas Iglesias puedan reabrir a un 15% en color naranja”, detalló.
En la ponderación en rango el estado presenta un puntaje de 15, por eso es que el Gobierno Federal anunció el viernes que Chihuahua pasaba a amarillo, ya que puntajes de entre 9 y 15 se consideran con riesgo epidemiológico moderado, aunque desde entonces se adelantó que habría una diferenciación regional de acuerdo a los distintos niveles de riesgo.
“Seguro estoy, que la región sur del estado llegará pronto al semáforo amarillo porque los chihuahuenses nos distinguimos por crecer venciendo cualquier adversidad, porque nunca bajamos la guardia, porque la grandeza del estado es la unión del pueblo y su Gobierno. Vamos a seguir empeñados en combatir esta pandemia Unidos con Valor”, señaló el gobernador.
El color de la semaforización lo determina el puntaje del riesgo epidemiológico de la siguiente manera:
El semáforo en rojo es considerado de máximo riesgo y cuyo rango de puntaje es de entre 32 y 42; el semáforo naranja es de riesgo epidemiológico alto y su puntaje es de entre 16 y 31.
El semáforo amarillo, de entre 9 y 15 puntos tiene un riesgo moderado y el semáforo en verde, entre cero y 8 puntos, es de bajo riesgo epidemiológico.
Javier Corral explicó que el país ha entrado a una dinámica de evaluación más precisa anexando 6 indicadores a los 4 que ya se venían utilizando, lo cual permite medir la magnitud y temporalidad de la epidemia por COVID-19, dentro de la heterogeneidad de las entidades, municipios, ciudades y zonas metropolitanas.
Los indicadores que definen el color del semáforo son los siguientes: 1) Tasa de reproducción (Rt) de COVID-19. 2) Tasa de incidencia de casos estimados activos por cada 100 mil habitantes. 3) Tasa de mortalidad por cada 100 mil habitantes (14 días) 4) Tasa de hospitalizados por cada 100 mil habitantes.
Además: 5) Porcentaje de ocupación de camas generales. 6) Porcentaje de camas con ventilador. 7) Porcentaje de positividad COVID-19. 8) Tendencia de casos hospitalizados por cada 100 mil habitantes. 9) Tendencia de casos síndrome COVID-19 por cada 100 mil habitantes. 10) Tendencia de tasa de mortalidad por cada 100 mil habitantes (14 días).
El titular del Ejecutivo estatal informó que la estimación de riesgos se llevará a cabo de forma semanal y se publicará de manera quincenal en caso de que el nivel de riesgo epidémico local se mantenga o disminuya, solo en el caso de que el riesgo se incremente en una semana, se deberán implementar las medidas correspondientes al nivel de riesgo del que se trate.
Destacó que la epidemia nacional y por consecuencia la estatal, se compone de diversas epidemias locales, asincrónicas y cuya dinámica es, hasta cierto punto, independiente.
“Por ello, Ciudad Juárez y los 9 municipios que comprende la Región Norte pasarán a color amarillo, mientras que Chihuahua capital y los demás municipios del estado permanecerán en naranja”, expresó.
Recordó que cuando el estado de Chihuahua cambió de rojo a naranja, a partir del lunes 15 de junio, tampoco lo hizo al mismo tiempo en todo el estado y Juárez tuvo que esperar una semana más en rojo.
Dijo que ahora es la región centro-sur del estado la que se encuentra en una etapa crítica de la epidemia, con alto número de contagios y casos activos que ponen en riesgo la vida de muchas personas, por lo que será la Región Chihuahua la que no avance en la apertura de actividades.
“El anuncio que realizó antier la Federación no debe de confundirnos sino al contrario, alentarnos para extremar cuidados con el propósito de buscar estabilizar al estado en toda su extensión”, indicó.
Explicó que el semáforo no representa integralmente la epidemia, sin embargo, sus indicadores orientan directamente sobre su intensidad, capacidad de respuesta a la misma, estimación del riesgo de reducir o incrementar la actividad de la epidemia en el nivel local, durante el proceso de reapertura de la economía formal e informal, así como las actividades sociales.
Agregó que los indicadores del semáforo son una guía para la toma de decisiones, no sólo para las autoridades, también para ámbito personal y colectivo.
Destacó que desde el inicio de la pandemia de COVID-19, sus decisiones como gobernador se han tomado pensando en la vida de sus habitantes por encima de todo.
El gobernador también resaltó que en Chihuahua se ha logrado transitar por las tres fases de la pandemia sin que los servicios de salud se vean rebasados.
Consideró que en este descenso de la curva epidémica lo más importante es que la reapertura de la economía y las actividades sociales sea de manera gradual, sin perder de vista un solo momento la gran responsabilidad de preservar como valor supremo la vida de los y las chihuahuenses y enseguida la economía del estado.