Raúl Ruiz.- Todos se preguntan, ¿Qué vino a hacer el presidente a Ciudad Juárez? No era necesario venir a inaugurar esas pequeñas obras que no representan gran valor social. No digo que no sean valiosas. Me parece que no eran de la importancia, que amerite la visita presidencial. ¿Entonces?
El evento del presidente Andrés Manuel López Obrador fue un espaldarazo para Juan Carlos Loera. Los delegados por lo general no suben al presidium, de hecho Juan Carlos se sentó enfrente, en primera fila, hasta que el propio presidente le hizo señas para que se sentara en la silla que ocupaba Cabada, quien se había parado para dar su speech.
Hasta le dijo Cabada en tono de broma, ¡hey no me ganes el lugar! Pa’ pronto le trajeron otra silla a JC, a solicitud de AMLO, quien agradeció al delegado todo lo que ha hecho por Chihuahua. “Sigue así como vas”, le dijo en referencia a los acontecimientos de las últimas semanas. Y el mensaje a los chihuahuenses fue lacónico, sin profundizar en el conflicto.
“¡Prevalecen los compromisos con Chihuahua, pese a las diferencias con el gobierno estatal! Que no se malinterprete, no vamos a abandonar al pueblo de Chihuahua, vamos a seguir apoyando, porque no es que tengamos diferencias con la gente de Chihuahua, tenemos diferencias con el proceder de autoridades que están poniendo por delante el interés partidista y se olvidan que por encima de los intereses personales, intereses de grupos, intereses de partidos, por legítimos que sean, está el interés general, el interés de la nación.”
Estuvo aquí por un par de horas a lo mucho, y siguió su gira rumbo a Sonora. ¿A qué? Obvio, a dejar en claro que allá el bueno será Alfonso Durazo. Son señales muy claras. Invento de los priistas.
Mientras tanto, los panistas en su rebatinga. Todo parece indicar que de darse la consulta interna por delegados, arrasaría Maru Campos. A menos que hubiera una jugada macabrona desde el Comité Ejecutivo Nacional para tumbarla del caballo. Por lo pronto, ella sigue con su pre, pre campaña.
Los priistas, adormecidos, casi zombies. Inamovibles las aguas en el tricolor. Salvo la zarandeada que Teto Murguía le ha puesto al cascarón, para la gubernatura; y la intención abierta de Adriana “la Güera” Fuentes que dijo yo quiero ser la alcaldesa de Juárez, todo muerto.
Entre los escombros del PRI en la frontera, un grupo de jóvenes necios, levantan sus herrumbrosas manos para indicar que están dispuestos a abanderar su causa pese al deterioro fatal de su imagen como partido.
Necios porque a sabiendas del repudio popular que tienen por el daño tan terrible que le causaron a la nación, dicen: nosotros no tenemos porqué pagar los platos rotos. Esta camada de jóvenes con experiencia, pretende empujar hasta conseguir las candidaturas para 2021.
Tengo por lo pronto estos nombres: Gerardo Fierro, Viviana Juárez, Abraham Sansores, Christian Aguilera, Jorge Meléndez, Ana Laura Rentería, Emiliano Martínez, Eduardo, Villarreal, Carlos Cruz. A reserva que se vayan incorporando más al proyecto tricolor.
Usted ¿Cómo la ve?