Inicio DESDE EL AULA El que más se esfuerza es quien recoge los mejores frutos

El que más se esfuerza es quien recoge los mejores frutos

Heriberto González Valencia.- Hay una fábula bastante conocida en inglés en la que una hormiga trabaja todo el verano reuniendo comida y todos los insumos necesarios para sobrevivir el cruel invierno, mientras un saltamontes lo único que hace es descansar, pasear y jugar durante el verano y dice que cuando el invierno llegue no tendrá problemas.

Al llegar el invierno, la hormiga saca provecho de su arduo trabajo de verano y disfruta de su comida mientras descansa, el saltamontes padece de hambre y frío.

Esto es lo que por generaciones nos han enseñado moralmente y como regla de la sociedad: el trabajo de toda la vida dará sus frutos al final. 

Pero también está el cuento de los dos hermanos, uno muy juicioso y trabajador quien sigue cuanta regla tiene la sociedad y se esmera mucho en su trabajo pues piensa en un futuro muy tranquilo y sin necesidades. El otro hermano, una persona que se hace querer de todo el mundo por su forma de ser, un día cualquiera decide que el trabajo no es para él y deja de trabajar para vivir de sus parientes y amigos sin pensar ni un minuto en el futuro, viviendo su vida día a día.

Al final de este cuento, el hermano que todo lo planeó para un final feliz, por cosas del destino y problemas económicos nunca llegó a tener el retiro por el cual trabajó toda su vida, mientras que su hermano el despreocupado por la vida se casó con una anciana multimillonaria la cual murió a los pocos días de la boda dejando toda su herencia al despreocupado hermano y así asegurando un final tranquilo para éste.  

Entonces veamos los casos de la vida real. Por ejemplo, el sonado escándalo de la inmensa compañía norteamericana ENRON, en la que miles de trabajadores invirtieron los ahorros de sus vidas y quedaron sin nada después de que la compañía quebrara por extraños manejos. O cuando los familiares de grandes narcotraficantes u otros delincuentes llevan vidas con abundancias sin haber hecho el más mínimo esfuerzo.  

La enseñanza: con el esfuerzo se consigue lo que uno quiere, es una fábula muy bonita y parece la indicada a proponer a nuestras futuras generaciones, el problema es que la cruel realidad es otra.

Y aclarando rotundamente que la idea no es encaminar la mente a malos pensamientos, hoy en día hay millones de mexicanos dando su mejor esfuerzo, colocando todo de ellos para que su trabajo sea el mejor de todos, pero esto no se ve reflejado en la calidad de vida que llevan y mucho menos en un futuro alentador.