Una cuenta de Twitter falsa, atribuida al Presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, Georg Bätzing, reportó la muerte del papa emérito Benedicto XVI, mismo que dirigió la iglesia católica de 2005 a 2013.
Minutos después la misma cuenta de Twitter aclaró que todo se trataba de una mentira, mientras que El Vaticano guardó silencio ante la noticia.