El pasado 28 de febrero, la Secretaría de Educación Pública (SEP) compartió en el Diario Oficial de la Federación las Reglas de Operación para La Escuela Es Nuestra (LEEN) en el 2022, así como la desaparición del programa Escuelas de Tiempo Completo (PETC).
Finaliza así un programa que nació en 2008 y que de acuerdo con el Gobierno Federal, buscaba mejorar la calidad de aprendizaje a través de la ampliación y uso eficiente del tiempo escolar de los alumnos.
De acuerdo con la Organización Mexicanos Primero, esta decisión afectará a 3.6 millones de estudiantes mexicanos y los derechos a la educación y a la alimentación.
Fue en septiembre de 2021 que un Juez de la Ciudad de México otorgó un amparo a Mexicanos Primero, en el cual ordenó a la SEP y al Ejecutivo federal a garantizar los recursos económicos necesarios para mantener el programa; sin embargo, esto “traiciona la promesa hecha hace un año” de mantener y apoyar a las escuelas de tiempo completo.
Desde el año pasado se perfilaba que este programa sería borrado por el presidente Andrés Manuel López Obrador y la SEP, aunque familias, docentes, directivos y organizaciones estaban en contra de la eliminación, eran muchos los beneficios que el PETC otorgaba.
Garantiza el derecho a la educación y dentro de sus beneficios, se encuentra las 3.5 horas extras en promedio, las cuales eran utilizadas por los docentes para realizar las tareas del día y resolver dudas generadas del horario de clases normales, además de incluir disciplinas complementarias como el aprendizaje del idioma inglés y computación.
De acuerdo con la UNICEF, en un estudio realizado al PETC, enfocado principalmente al servicio de alimentación, señalaba que el 74.3 por ciento de las escuelas que tenían el programa se ubican en regiones con un alto grado de marginación.
Este programa buscaba atender una necesidad social que recién iba surgiendo, porque en las últimas décadas, las mujeres comenzaron a incorporarse al mercado laboral, haciendo que este programa sea de gran apoyo para las familias, ahora con ambos padres trabajando, los menores podían permanecer seguros dentro de las escuelas y continuando con el aprendizaje.
Una de las características del programa era el servicio de alimentación, el cual fue agregado por el gobierno federal en el 2013 con el fin de obtener mejores resultados académicos, asegurando la permanencia de los estudiantes en las escuelas.
De acuerdo con el estudio de la UNICEF, un 65.8 por ciento de los beneficiarios del PETC señalaba que el alimento que recibía en la escuela era de los primeros que consumía en el día.
Juárez Hoy
