LA HABANA- El Gobierno cubano elimina la penalización del 10 por ciento al dólar estadounidense en el mercado cambiario, medida que estuvo vigente desde 2004, como parte de un plan para impulsar la economía.
Desde las primeras horas del lunes se observaron aglomeraciones de clientes en sucursales bancarias para realizar transacciones, al tratarse de una de las medidas más demandadas por la población.
Hace 16 años, el entonces Gobierno encabezado por Fidel Castro decidió gravar los dólares en respuesta a las prohibiciones de operar con tales divisas en bancos extranjeros como parte del bloqueo económico, financiero y comercial que Washington mantiene contra La Habana desde 1962.
Dicha sanción obliga a la nación caribeña a comprar otras divisas, con las consiguientes pérdidas debido a las tasas de cambio.
Al anunciar la nueva medida la semana pasada, el viceprimer ministro Alejandro Gil Fernández expresó que a pesar de que el cerco continúa, se pretende incrementar el ingreso de divisas y estimular el desarrollo de la economía.
El panorama económico cubano está muy afectado tras la pérdida de los millonarios ingresos del turismo y las exportaciones debido al confinamiento por la pandemia del nuevo coronavirus.
La eliminación de la penalización a la tasa de cambio del dólar beneficiará a “todos los cubanos, los que viven dentro y fuera de Cuba”, subrayó el también titular de Economía y Planificación.
Este lunes se amplían de igual manera, las ventas en el mercado minorista en Moneda Libremente Convertible (MLC), con nuevas ofertas de productos de ferretería, aseo y alimentos.
Se dispusieron para ello 72 establecimientos (57 para ventas de alimentos y aseo, así como 15 para artículos de ferretería), distribuidos por todo el país caribeño (14 en la capital y al menos dos por provincia).
Ambas medidas forman parte de la nueva Estrategia Económica y Social dirigida a impulsar la economía y enfrentar la crisis mundial generada por la pandemia.
El programa incluye la creación de mercados mayoristas para abastecer a los trabajadores “por cuenta propia” (privados), otro viejo reclamo del sector autónomo cubano que suma unas 600 mil personas.
Prevé, además, fomentar las cooperativas no agropecuarias y dar mayor autonomía a las empresas estatales, entre otras disposiciones.
Xinhua