Inicio CARTAPACIO Chapulines 2.0

Chapulines 2.0

Raúl Ruiz.- Ya nos habíamos acostumbrado a la fiebre de chapulines. Un chistoso saltimbanqui al que se prestaron todos los partidos durante el ejercicio previo a la selección de candidatos. Especímenes sin sostén ideológico, sin convicción partidista y sin vergüenza, que compraron la candidatura en el partido de su acomodo. Saltando de aquí para allá y de allá para acá. En ese juego de swingers políticos, la militancia quedó lastimada y los simpatizantes, asqueados por la promiscuidad tan nauseabunda que se produjo con este batidero. 

Sin ápice de decoro, se instalaron cuan anchos son y comenzaron sus campañas; y cada candidato se solazaba de ser diferente, y por supuesto, mejor que los demás. Pocos les han creído. Sin embargo, la persuasión de bajo precio también produce atracción. Aunque sea momentánea. Como el perfume barato de una prostituta una noche de locura y desesperación al calor de los tragos. En el momento, todo es pasión y contento, pero al amanecer los aromas de la promiscuidad se impregnan en la piel y tardan en despegarse. El día del debate, entre los candidatos a la gubernatura, se produjo la impúdica segunda fase del brincoteo. Le llamaremos chapulinazgo 2.0, otros le llamarán acercamiento al voto útil.

Pues que les cuento… que el primero en aventar la liana fue el doctor Alejandro Díaz, un personaje interesante en Chihuahua, que iba convenciendo poco a poco a los electores con su imagen pulcra y su interés por el bienestar de los chihuahuenses. Crítico de los políticos tradicionales a los que tachó de ineptos, cerdos y ratas. Y ya tenía un buen tambache de seguidores. Cuando el doctor Alejandro Díaz dio el banderazo a favor de la candidata del PAN, a la dirigencia nacional de su partido se les pararon los pelos como puercoespín y se les desorbitaron los ojos. ¡No lo podían creer!….. yo tampoco. Gerardo Islas Maldonado, dirigente nacional de Fuerza por México, de inmediato armó rueda de prensa y lo acusó de traición y ya entrado en gastos, por lavado de dinero.

Al segundo día, la candidata de Redes Sociales Progresistas, María Eugenia Baeza, hizo lo mismo; ni siquiera les pidió su opinión a los candidatos que la arropaban. Mientras ella entregaba cómodamente el pundonor del partido, Laura Solis y María San Luis, deshidratadas y hambrientas buscaban en la población más necesitada, una sonrisa y la esperanza de un voto. Víctor Tenorio, sacando el voto entre los viejos amigos. De casa en casa. Y Vicky Caraveo, reinventando el oficio de la sindicatura; por semanas dándole lustre a un partido sin futuro, prestando imagen propia para impulsarlo. Ahora, todos ellos, huérfanos de liderazgo.

A las 5:10 p.m. de aquel día, el candidato de RSP a la alcaldía, Misael Máynez, estaba en el crucero de la Vicente Guerrero y avenida Tecnológico, con la lengua de pechera por el calorón. Acompañado de una brigada de seis simpatizantes con banderolas todas ajadas; cenizos ya de tanto sol, repartían propaganda para su candidata a la gubernatura y el propio Misael, en el semáforo, tratando de convencer a los conductores que él puede ser un buen alcalde y doña Maru Baeza, la mejor gobernadora. Aún no sabían del chapulinazo de su candidata. Nomamespancho.

Mientras tanto, desde los pasillos del CDE del PRI, brota el rumor que en breve se pronunciará Graciela Ortiz a favor de Maru Campos. Desde hace dos o tres semanas el rumor ha sido muy fuerte, pero Chela se ha resistido a ello. Incluso el día del debate no pidió el voto para su partido. Dejó entrever que lo mejor era votar contra el partido Morena, pero hasta ahí. Y para no desentonar, los operadores de la súper alianza contra Morena, habrían convencido también a El Caballo Lozoya. 

Pero, según yo, el corcel no tendría vergüenza si hace lo mismo. Luego de haber perdido un mes de valioso tiempo en atizarle a la candidata del PAN, bautizándola como la candidata de la corrupción; se vería hasta lambiscón integrándose al proyecto de Maru Campos. Pero, todo es posible en estas inauditas elecciones. ¿Qué se percibe con esto? Primero, que hay un gran temor por perder la elección; y suponen que al decantar su poco capital político a favor de la candidata del PAN tendrán un enorme costal de votos producto de su negociación personal.

Nuevamente menosprecian  a la militancia y ofenden la inteligencia de los pocos o medianos simpatizantes que habrían convencido durante su campaña. Las matemáticas así no funcionan. Es como aquel viejo chiste: “A ver niños. Si en una mano tengo 8 naranjas, y en la otra tengo tres piñas… ¿en total que tengo? ¡Unas manotas, maestra!”. El voto de sus otrora simpatizantes no es acumulable para su contabilidad. En segundo lugar, no tienen memoria. Ni siquiera a corto plazo. Echarle montón al adversario se revierte.

A Maru Campos la hicieron crecer así. La victimizaron, la martirizaron y hoy, por sí misma podría ganar la elección. Los momios indican empate técnico. Pero una cosa es decirle al encuestador la intención del voto, y otra, es ir el domingo 6 de junio a cruzar la boleta. Vamos a ver como cierran esta semana la contienda.

Artículo anteriorLograremos la transformación del estado de Chihuahua: Loera
Artículo siguienteAseguran 368 cartuchos útiles de varios calibres