Daniel Martínez.- El día de hoy quiero hablarte de Britney Spears, esa estrella que ahora es burla, comidilla y blanco de la crítica social (bueno, nunca ha dejado de serlo). Esa mujer que es etiquetada de la peor manera y que solo por momentos las personas empatizan con su vida y las situaciones difíciles que le tocó vivir.
No es un secreto que soy fan de ella y que este escrito pueda verse sesgado por esa condición. Muchas personas me preguntan si aún la admiro, si es que soy consciente del contenido que sube en sus redes sociales y la decadencia de su “éxito”. Siempre he visto a esta mujer como una inspiración, más allá de un producto del marketing.
Es una mujer que perdió su virginidad siendo menor de edad, con un joven adulto. Desde ahí quiero pensar que sabemos que no está bien, ¿verdad? Que quien diga que una niña a esa edad es muy consciente de lo que realiza, le hace falta información. ¿Correcto?
Siguiente. Es una joven que a sus 17 alcanzó fama mundial y responsabilidades que seguramente ninguno de nosotros puede entender, que su vida cambia de manera descomunal y bien, debe dejar de ser una adolescente cualquiera para ahora ser “la imagen perfecta” (Porque así la vendieron. ¿O crees que ella ya era suficientemente madura para elegir esa responsabilidad?)
Comienza a tener noviazgos… Oye, tú y yo sabemos que las rupturas no son del todo fáciles de procesar, aun siendo adultos, siendo seres “ordinarios”. ¿Crees que ella debería haber madurado de manera diferente por ser famosa? Seguramente DEBIÓ tener cuidados especiales, en aquella época en donde la salud mental no era tan importante, ¡claro!
¿Sabías que abortó porque su novio no deseaba ser papá? ¿Alguna vez has pasado por un aborto por este motivo? Si eres hombre, definitivamente no podemos opinar del tema, pero quiero pensar que aparte de pasar por procesos biológicos importantes, emocionalmente existió un duelo… no bien procesado, pero debió procesarlo bien, porque pues… era famosa ¿verdad?
Se convierte en madre. ¿Sabes que gestar tampoco es sencillo para todas las mujeres? Pero ella sí debió saberlo porque era famosa y pues es normal que todas las mujeres sepan pasar a la perfección por ello. ¿No crees que juzgar a una persona que no pudo desarrollar bien ciertas etapas de su vida, procesar duelos, ser un producto que vende imagen y ahora convertirse en madre, en medio del ojo público, es demasiado o aún no? Porque claro, es famosa, no puede ser humana y tener los mismos miedos, tristezas, soledad y sueños que cualquier otra persona.
Te propongo algo: juzguemos nuestra propia vida. Cualquier persona puede ser objeto de críticas, hasta nosotros mismos, pero cuando es hacia nosotros no es válido, nos gusta señalar a otros, esto es solamente un reflejo de cómo estamos como sociedad, que no sabemos soltar cosas que no nos pertenecen, creemos tener la solución de la vida de los demás, pero cuando se trata de nosotros mismos, no lo aceptamos.
Esto no es para defender a esta artista. Ni me conoce y seguramente nunca lo hará, pero es para decirte a ti que te enfoques en tu vida y seas amable con una mujer que se encuentre sana o no. No te ves bien señalando.
Peor aún, si pasa por alguna condición psiquiátrica, algún trastorno, depresión, ansiedad, soledad, tristeza, sea lo que sea… seamos empáticos con cualquier persona, no conocemos lo que es andar por sus zapatos…
Y si tú requieres apoyo especializado con este u otro tema, contáctame. A mí me encuentras en FB y YouTube como Psicólogo Daniel Martínez, en IG danielmartinez.mx
Y no olvides que tus límites están en donde tú quieras, en donde ubiques tu fronteramental… Te espero la próxima semana en este espacio de letras en JUÁREZ HOY.