El mayor mal es el gobierno ilimitado. Friedrich Hayek, jurista y filósofo austriaco
Cuauhtémoc Monreal Rocha.- Déjenos jorobarlos primero y luego le entramos al tema.
Dice un político de los de ahora a otro: Yo no voto por personas, voto por ideas. ¿Y si te doy un millón de pesos libres de impuestos? Entonces voto por quien sea, porque la idea no es tan mala.
Bueno… Entrémosle: Todo sea por el amor de Dios, han de haber dicho muchos creyentes, cuando se enteraron de que, por fin, ahora sí morena y compinches se quedarán por muchos años con el poder absoluto; es la nueva cleptocracia del siglo XXI, descendiente del PRI, aunque lo nieguen: al PAN, los mexicanos, lo aguantaron en el poder solamente doce años.
Como de momento no hay oposición, la nueva élite gubernamental, defensora del pueblo, va por la vía libre para afianzar la autocracia, como en los mejores tiempos del revolucionario; ante esta situación, la Señora Presidente de México no tiene por qué cambiar el método que utilizó el hombre de Tabasco, para gobernar; Claudia ahora sí ya no tiene quién le ponga piedras en el camino y puede gobernar, si se decide neutralizar al caudillo, como le dé su regalada y… gana.
La mayoría absoluta del Poder Legislativo (calificada le llaman), sea legal o no, demuestra que el hato ovejuno de San Lázaro se lo garantizará durante los próximos 6 años 6, y la soberbia gubernamental se dejará sentir con toda su fuerza y mandará al diablo, todos los derechos fundamentales de 130 millones 130 de mexicanos, al haber pasado por encima de la SCJN y nulificarla jurídicamente, aparte de otros estorbos no gubernamentales que han desaparecido definitivamente, con argumentos falaces.
Insistimos, por el momento, no hay oposición que detenga la marea morenista y es más fácil que lo que queda del PRI y del PAN se unan a la 4T, haciendo pleno uso de las concertacesiones que, por ser millonarias, convencen a cualquier “idealista” de los tiempos actuales, venga de donde venga. Vale.