La ausencia del Estado genera que los ciudadanos busquen llenar el vacío a través de comportamientos de agresión. Jorge González Moore, escritor colombiano
Cuauhtémoc Monreal Rocha.- Un mes más y termina el verano y el calorón; pero tranquilos porque todavía nos va a quedar la pandemia. Aclaramos que el título de esta prosa no literaria, nada tiene que ver con la hermosa canción de Lara, “Granada”, donde se lee: Tierra ensangrentada…
Nos vamos a referir solo a nuestra ciudad y a la capital del estado, aclarando que los encabezados aparecieron en los periódicos locales del 20-08-20 y que no son nada nuevo bajo el sol.
H. CIUDAD JUAREZ.- Arrestan a presunto narcomenudista, le encuentran marihuana. Arrestan a dos hombres armados. Caen presuntos responsables de decapitar a un adolescente, uno tiene 14 años de edad. Ejecutan a presunto asesino de seis agentes antisecuestros. Se meten a una casa para asesinarlo. Etc., etc., etc.
CHIHUAHUA.- Lo persiguen hasta su casa y le disparan. Localizan fosa clandestina en San Juanito. Lo matan y tiran su cuerpo en terracería. Continúan desmanes en Galeana. Paralizada Chihuahua, por defensa del agua. Javier Corral, es tibio y cobarde. Etc., etc., etc.
Ante esta sangrienta situación, los ciudadanos se preguntan: ¿La culpa es de la sociedad? ¿Es del Estado Mexicano? ¿Es de los ricototes causantes de la enorme brecha social? Lamentablemente ninguna autoridad responde estos cuestionamientos y las ciudades del Estado Grande, día con día se siguen ensangrentando como si fuera tarde de toros y sus habitantes siguen viviendo en completo estado de indefensión.
Y no nos metemos en lo nacional, porque con el circo mediático de los videos de Emilio Lozoya Austin y Asociados, es más que suficiente, aunque hay que agregar el video del impío, perdón, del excelentísimo señor don Pío López Obrador, porque no sabemos si deveras es un hombre impío o si como Pillo -otra vez perdón- Pío, haya hecho en su… larga vida, alguna obra pía.
De todos modos, ya su carnal, el autócrata de Palacio Nacional, lo justificó ante el pueblo bueno y sabio, al decir que los bonches de dinero de Lozoyita son pura corrupción, mientras que los sobres de dinero de don Pío -su “brody”- y León, su compa, son una donación. No “coments”. Vale.
