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Quisiera|Ser Una travesía al fondo de la cordura

Autor, actor y director juarense de 34 años, Ricardo Aguirre empezó a hacer teatro desde hace 11 años en el Taller de la UACJ. Fue de ahí que pasó a Telón de Arena, donde ha participado en varios montajes y ha impartido talleres de teatro. También ha escrito sus propias escenas en algunas obras, pero su propuesta actual con Quisiera|Ser es un unipersonal.

“Un unipersonal se parece mucho al monólogo, pero a diferencia de este último que es un solo personaje el que habla a otros personajes, el unipersonal es un solo actor en escena que realiza varios personajes que hablan entre sí, lo que le da otra dinámica para actuar varios personajes”, explica Ricardo.

“Otra característica de los unipersonales es que es puro Yo Yo Yo. Aunque algunos digan que es un poco ególatra, lo cierto es que es una cosa muy personal en la que uno comienza escribiendo a partir de uno mismo, pero que no se confunda esto con pensar que la historia es sobre mí. Hay algunas cosas personales mías que duran unos 10 minutos, pero el resto de la obra se trata de todos nosotros”, agrega el artista.

Escrita, dirigida y actuada por Ricardo Aguirre, Quisiera|Ser se encuentra en temporada en Telón de Arena hasta el próximo 1 de agosto, en funciones diarias de jueves a domingo a las 8:00 de la noche.

Quisiera|Ser comienza con un empleado de oficina que tiene algo que decirle a todos sus compañeros. “Mi idea aquí es que los compañeros de trabajo son todas las personas que vienen a ver la obra y el momento ficticio en que este personaje se abre, es justo el momento en el que todos se unen; así que los espectadores son parte, al menos en cuerpo, del ritual de llegar todos al trabajo, cuando de repente alguien se abre y empieza a contar muchas cosas personales”, comparte el entrevistado.

“Un empleado de oficina se abre ante sus compañeros. Busca compartir más que recuerdos de su infancia, su propia travesía al fondo de la cordura. Comienza por una historia particular a un personaje para, luego, convertirse en una universal: la búsqueda por un sueño, nuestra lucha interna y la tentación a desistir. Es una entrada empática a un estado anímico en el que todos podemos reconocernos hermanos”, define su autor.

Aunque ninguno de los personajes que aparece a lo largo de la obra tiene nombre, cada uno tiene un rol dentro de la oficina. Así, el protagonista es simplemente Adulto que aparece rodeado de otros como Niño, Recursos Humanos, Administrativo, el Guardián del Recinto de la Paz y algunos personajes más que entran y salen.

“El teatro contemporáneo es como un ritual, algo a lo que todos vamos y esta propuesta comienza con este cascarón que luego vamos a abrir entre todos, pero antes de abrirlo debemos conocerlo porque todos somos parte del mismo lugar de trabajo, un lugar donde nos reunimos”, remarca Ricardo.

Ya se había presentado en 2020, pero en esta ocasión el unipersonal presenta algunos cambios. “Hay cambios en la obra, en esa búsqueda de que se exprese lo mejor posible, no tanto en técnica, sino en cuanto a su mensaje. Pero no se trata de una obra de moraleja, sino de una obra que le permite al espectador construir su propio espectáculo. Por eso, cuando platico con quienes la han visto, cada uno tiene enfoques distintos y a cada quien le llamaron la atención distintas cosas”, explica con satisfacción.

Señala que la obra es muy movida en cuanto a corporalidad porque ese es el principal lenguaje en el que se apoya, pero también tienen gran peso la musicalización y la iluminación. La línea del nombre de la obra, Quisiera|Ser, tiene consecuencias escénicas y le ofrece pistas al espectador respecto a los mensajes que se transmiten a lo largo de ella.

Una obra no terminada

 “Para mí, el teatro me gusta más como una conversación, no literal, sino que yo hago un montón de cosas y sonidos que se ven ridículos porque no se hacen en la vida cotidiana, pero al final generan un significante distinto. Para mí eso es una conversación”, explica Ricardo.

“Sería muy padre que otro actor la interpretara e incluso que la hagan dos actores, lo que también podría funcionar; sin embargo, mi obra no está publicada como tal para que alguien la pueda hacer ni tampoco se la he entregado a nadie para que la pueda montar porque la considero aún no terminada. Mi objetivo es dejarla terminada este año”, finaliza.

Juárez Hoy