Daniel Martínez.- Muy buenos días. Espero estés teniendo una muy bonita semana. Yo soy Daniel Martínez, tu psicólogo, y en esta ocasión te hablaré de un tema que me pidieron a través de mis redes sociales y este es: Me gusta mi pareja pero quiero que cambie. ¿Te ha pasado o conoces a alguien que le pasa esto?
Bueno, definitivamente nadie somos perfectos, todos tenemos algún detallito que tal vez no le agrade a algunas personas pues todos somos únicos, diferentes e irrepetibles, ¿pero qué pasa cuando esa persona que queremos que cambie es nuestra pareja? ¿Cuando vemos que se acabó el encanto del enamoramiento y comenzamos a darnos cuenta que esas cositas que llegamos a pasar en un inicio empiezan a ser un problema que ya no podemos ignorar?
Bien. Primero que todo hay que reflexionar sobre el porqué nos incomoda esa característica de nuestra pareja. Hazte las siguientes preguntas: ¿es algo que forma parte de su personalidad? Si así le conociste y te “enamoraste”, ¿por qué ahora querrías hacerle cambiar? ¿Te sientes inseguro o insegura? ¿Qué pensamiento viene a tu mente con frecuencia cuando te sientes así? Analiza tus respuestas, tal vez haya algo que deban o debas trabajar en terapia.
Sin duda, cada pareja tiene una dinámica distinta y cada quien decide estar con quien quiere. Debemos ser responsables de nuestras decisiones, las parejas no nos salen en una rifa, somos nosotros quienes decidimos cuánto tiempo estaremos en algún lugar y si estamos cómodos o no.
Cada uno de nosotros merece vivir feliz y tener relaciones sanas, pero no por ello las personas con las que convivimos tienen la obligación de darnos todo lo que queremos, cuando y como lo queremos; en otras palabras, nadie está obligado a cambiar por nosotros.
Todas las personas realizamos cambios en nuestras vidas cuando creemos que nos hará bien hacerlo, no cuando otra persona nos lo exige, las adecuaciones que hacemos en nuestra manera de ser o actuar también responden a lo que estamos listos para expresar. Todo esto lo podemos entender cuando lo ponemos en primera persona, pero parece que a muchas personas se les olvida cuando hablan de “la pareja” o de sus relaciones.
Te propongo que te hagas más responsable de tu propia vida, no seas víctima de un frágil ego que puede violentar a otra persona por el simple hecho de ser quien es. Si deseas que la persona que está contigo cambie, probablemente no sea la persona que quieres. Puede ser que solo la estás idealizando y haciéndola responsable de todo lo que tú exiges.
Te pongo un ejemplo. Cuando vas y adquieres alguna prenda en el centro comercial, no vas y eliges algo que no te queda y te enojas porque tiene que cambiar, ¿verdad? Vas por algo que te guste y que se adecúe a ti. Piénsalo, tal vez estás eligiendo a una persona que no es para ti, probablemente le quede a alguien más. Pero, ¿para qué quedarte con alguien que no te queda? Ego, control, inseguridad, mandatos familiares o como dicen, ¿clavo que saca otro clavo? ¡Piénsalo!
Y si tú o alguien que conoces requieres apoyo especializado con este u otro tema, no dudes en contactarme, a mí me encuentras en Facebook como Psicólogo Daniel Martínez y en YouTube con el #Fronteramental…
Y no olvides que tus límites están en donde tú quieras, en donde ubiques tu fronteramental…