Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- Esta obra del fénix de los ingenios, así llamado por Cervantes, trata sobre un pueblo cordobés, llamado Fuenteovejuna, en la que el protagonista es el pueblo que se rebela contra la opresión. Una noche del mes de abril de 1476 se amotinan para dar muerte a Hernán Pérez de Guzmán, Comendador Mayor de Calatrava, por los muchos agravios infligidos. Y entrando en su casa lo mataron a pedradas.
Los reyes católicos enviaron un Juez pesquisidor que atormentó a muchos de ellos y en su afán de averiguar la verdad mató a uno llamado Mengo; sin embargo, hombres y mujeres, pese a las torturas, amenazas y presiones, no dijeron nada más que: ¡Fuenteovejuna lo hizo, Señor!
El drama al estilo de Shakespeare, en el transcurso del tiempo se convirtió en la iconografía de una lucha social. El PRI y el PAN propiciaron una reacción similar, a salvo la evolución y civilización, por los siglos transcurridos, pero la rabia de un pueblo se manifestó en los votos de 2018. ¿Quién sacó al PRI y al PAN de la Presidencia? ¡Fuenteovejuna, Señor!
¿Volverá Fuenteovejuna a los escenarios como una obra en algún teatro o podría manifestarse de nuevo en las urnas? ¡Ojalá!
PD.- Un adiós con profundo dolor a Toño Tarín, al que como decía Ortega y Gasset: yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella no me salvo a mí. Los abusos que sufrió no pueden, no deben ni quedarán impunes. ¡Creo con sinceridad que la acción de unos y la omisión de otros lo mataron!
(*) Obra teatral de Lope de Vega; sacerdote, poeta y dramaturgo español del Siglo de Oro.
