Raúl Ruiz.- Los mexicanos pensamos que vivimos en un país soberano, que se rige por sus propias leyes, con sus propias autoridades, mientras que, cruzando el río Bravo, la óptica es diferente. Los gringos suponen que México es un satélite. Incluso un pararrayos que pueden utilizar ad libitum, para lo que se ofrezca. Y que el mandatario mexicano y autoridades bajo su mando, deben seguir su guion.
Esto no es novedad, desde siempre es sabido, pero ahora, las cosas se les están desacomodando y suponen que deben hacer ciertos ajustes para regresar a nuestro país al redil.
Recientemente, un influyente personaje norteamericano precisa algunos puntos que nos permiten advertir los supuestos que acabo de expresar.
William (Bill) Barr, ex fiscal General de EU, allá en estrangia, comenta: “…Fui allá un par de veces (refiriéndose a México) para ver si podríamos enderezar la columna vertebral de este presidente (refiriéndose a AMLO). Él cree que con abrazos y no balazos se maneja mejor la situación, pero en mi opinión, está perdiendo el control del país”.
“Los cárteles tienen decenas de miles de millones de dólares a su disposición. Pueden corromper a quien quieran ahí y tienen ejércitos que son paramilitares, vestidos como militares, en vehículos blindados…”
Y OJO CON ESTO: “Cuando quisimos arrestar al hijo del Chapo Guzmán, aparecieron 700 tropas paramilitares, con camionetas artilladas con calibre 50 y el ejército mexicano se retiró”.
Y TERMINA DICIENDO: “Lo que siempre me ha preocupado, es que el gobierno de México vaya a compartir la soberanía con los cárteles y llegar a un modus vivendi con ellos. ¡Y nosotros no tenemos ya nada de control sobre este territorio! Y ahora ya perdimos el control de la frontera”.
La preocupación que tienen los gringos, es la pérdida del control, no tanto la putrefacción social.
Como reflexión me queda: Hoy más que nunca, debemos ubicar ya al narco imperio como un jugador más en el tablero del poder en México. Y partiendo de este análisis hacer los escenarios futuros. Por lo pronto, observemos las elecciones del domingo 5 de junio.
Voy a ver escaparates para escoger mi regalo por el Día del Padre. Seguimos en contacto.