Prefiero la libertad con peligro, que la paz con esclavitud. Jean Jacques Rousseau, polímata suizo-francés
Cuauhtémoc Monreal Rocha.- ¡Carajo! Vivimos en un mundo tan loco (siempre lo ha sido) en que la comida es pura chatarra, amén de estar contaminada de sustancias nocivas para la salud. En cambio, ¡oh mama mía!, ahora resulta que el jabón tiene avena, miel de abeja y vitaminas de la A la Z. Moraleja: Comamos jabón.
Ahora comencemos escribiendo que… conseguir la libertad en paz, en un régimen que niega los derechos constitucionales, es una tarea que raya en la tiranía. En las dictaduras, el sobado término de los derechos humanos, no existe; quienes nos desmientan, que no desmientan, que tiene, mucho menos existe la democracia, porque primero debe existir la libertad y luego todo lo demás, pues sin ésta, el individuo, el ciudadano, es un esclavo.
El actual gobierno de regeneración nacional, desde su inicio, ha tratado por todos los medios posibles, aunque sean violatorios de la Constitución, desaparecer aquellos organismos que le impidan imponer sus caprichos, sus aberraciones, tal como lo acaba de demostrar el INE, instituto penetrado por Andrés, al entregarle a éste, incondicionalmente y violando flagrantemente la Carta Magna, el Poder Legislativo, lo cual, tácitamente le otorga al Viejo, en charola de plata, la extensión del mandato, que tanto anhela este hombre que durante toda su vida buscó llegar al poder para quedarse con él, esgrimiendo el término democracia y la falacia de que: “por el bien de todos, primero los pobres”.
Viene el nuevo sexenio de la transformación de la vida pública del país, el segundo piso, según expresión de Claudia que, según los enterados, con el Congreso de la Unión entregado al primer mandatario, durante los próximos 3 años 3, la doctora, salvo que suceda un milagro político, será presidente rehén de López Obrador, porque el hombre de Palacio Nacional, que está por irse a la… finca de su propiedad, jamás aceptará ser florero o adorno de la primera Jefa de Gobierno de México, que tanto ha protegido.
Falta el Poder Judicial, también ya penetrado por el obradorismo y como ciudadanos, estamos seguros que las reformas a este Poder “autónomo”, serán aprobadas, tal y como las haya enviado el “amado líder” y en lugar de ministros, magistrados, jueces y demás funcionarios judiciales, éstos serán convertidos en comisarios del pueblo, de ese pueblo “bueno y sabio” que pone y quita, a su libre albedrío, a quien le da su… regalada gana, aunque en él ya no radique la soberanía y entonces, México, este país que ha sido libre desde su independencia, se quedará sin ella y consecuentemente sin democracia.
¿Equivocados? Démosle tiempo al tiempo. Vale.
