Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- Esperaba que el tema de hoy saliera del discurso del presidente. Como no hubo nada, les hablaré de nosotros mismos.
Somos un país único, en su posición geográfica, con salida a los océanos Atlántico y Pacífico, con el Mar de Cortés, con el Mar Caribe y el Golfo, con la enorme riqueza del sur, tanto al este como al oeste, con la enorme capacidad productiva del centro, el Bajío y el norte; con una historia única sin parangón. Eso somos.
Y no entiendo cómo es que no podemos capitalizar tanta bendición, ni antes ni ahora. ¿Qué nos falta? ¿Orgullo de pertenencia y de ser mexicanos? ¿Acaso cargamos con el estigma de la Conquista por más de 500 años? ¿Con el estigma del despojo de más de la mitad de nuestro país? ¿Con el despojo de que hemos sido víctimas por el caudillismo que nunca supo ser gobierno?
¿Cargamos con tanto, que no podemos vernos a la cara? ¿Acaso vivimos avergonzados de lo que somos como mexicanos? ¿De que no hemos sido capaces de organizarnos como sociedad para darnos el sistema de gobierno que funcione y que nos merecemos? ¿Por qué no despertamos de ese letargo que cumple ya más de doscientos años? ¿Cuánto tiempo nos vamos a dar para hacer lo que nos corresponde a cada uno?
El problema no es haber sido colonia, ni el despojo territorial sufrido, ni los gobiernos corruptos que hemos tenido, ni el que tenemos. El gran problema somos nosotros, así que debemos reflexionar y encontrar la manera de que este México que tanto amamos despegue y se convierta en lo que nosotros decidamos.
Tenemos que empezar de cero o de menos cero o de donde quiera que estemos, pero no podemos ni debemos seguir esperando que alguien haga lo que debemos hacer nosotros, y solo nosotros, cada quien lo que le corresponda.
Si queremos prosperar, debemos luchar por ello; si queremos ser, lo que sea que cada quien sueñe ser, debemos empeñarnos en lograrlo. Pero, primero hay que tener claro que nadie nos dará nada, que nadie nos hará lo que queremos ser, que esa es tarea de cada uno.
El día que comprendamos que no necesitamos gobiernos que nos roben o que nos den, el día que entendamos que debemos darnos el gobierno honesto y efectivo que necesitamos. Ese será el día que empecemos a construir nuestro sueño. Cada quien quiere un sueño, o un milagro, pero no se piden, se tienen que construir paso a paso, ladrillo a ladrillo. Nada es mágico ni fácil, todo será el producto de nuestro talento, ingenio y disciplina, de nadie más.
Dejemos de vivir solo por vivir y empecemos a vivir por el deseo natural de disfrutar de la vida y enamorarnos de ella. A nadie debemos amar más que a nosotros mismos. Sí, hay que hacer equipo, sinergias y trabajar unidos, pero que cada quien reciba en equilibrio con lo que aporte. México levántate, mexicanos despertemos y gritemos hoy como nunca: ¡¡Viva México!!
