Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- ¡Javier Corral es incapaz de tener amigos! Siempre que lo entrevisté en la radio, nunca tuve sensación de afinidad o acercamiento, incluso ni con Cinthya, siempre amable pero distante. Javier parece producto de un seminario o de una religiosidad extrema, adepto a cofradías o a sectas que se protegen a toda costa por algo muy poderoso que los une. La historia nos ha enseñado que ese poder solamente se da en la religión, el amor y la complicidad.
Al amparo de esos grupos, Javier está armando su defensa ante lo que se le viene encima después de cinco años de borrachera de poder. Carmen Aristegui sale en un programa especial con pasión inusitada en ella. Sale con toda la fuerza de su canal personal a defender a Corral. Sorprende a propios y extraños. Aristegui no es así, ella siempre fría, intensa pero centrada,
Sin embargo, ahora inicia la defensa de Javier y trata de explotar, usa su experiencia y logra con acierto, despertar sentimiento por la muerte del padre de Panchito por infarto al ser testigo presencial de su detención; y hasta intenta incitar a la gente para que defiendan a Javier Corral Jurado.
Aristegui no sabe que en Chihuahua la sociedad sí sabe a qué se dedicó Javier durante cinco años. Aristegui ignora que el gobierno de Corral fue un fiasco y más corrupto que todos los anteriores juntos. Aristegui trata de orientar a su panel contra los actos de justicia que buscan subsanar los abusos de Corral, pero Aristegui olvida, a propósito, que Javier se enriqueció a costillas del erario y de extorsiones a los acusados por los Expedientes X y que a todos violaron sus derechos elementales y el debido proceso.
Aristegui ignora que su defendido se opuso a que recibiera la mínima atención médica una de sus víctimas y lo dejó morir de Covid en prisión. Su nombre era Lázaro López y nunca entregó su cuerpo a la viuda.
Aristegui se apoya en Alfredo Figueroa, quien entra a defender a Javier con los argumentos desgastados de la nómina secreta con la que Javier Corral pretendió impedir que Maru fuera gobernadora de Chihuahua. Luego entra al panel Gabriel Reyes, quien fue procurador fiscal, a defender a Javier, y argumenta que los estados no tienen buena procuración de justicia y optan por el efecto y no por el resultado final.
¿Qué? Pareciera que no va a defenderlo, sino a exhibirlo, porque eso hizo Javier Corral con su promesa de “Justicia para Chihuahua”: buscar efectos mediáticos, porque de resultados solamente obtuvo derrotas en los tribunales federales, al comprobarse que victimizó cobardemente a los detenidos.
Aristegui trata de usar a su otra invitada: Anabel Hernández, quien claramente deja ver que no sabe del caso y la expone obligándola a apoyar a Corral, pero Anabel tiene tablas y colmillo y se le va por la tangente, opinando que en México nadie rinde cuentas. Anabel no cae en la trampa de Aristegui y ataca lo que sí conoce y domina: a la FGR que encabeza Gertz y ya en carrera le da un repaso a AMLO y sus mentiras de cada mañana.
Otro intento de defensa a Corral lo hace el periodista y escritor Ricardo Raphael, en un artículo titulado “El Perseguidor Perseguido”, publicado en Proceso este domingo. Raphael reseña un thriller en el que un convoy tan aparatoso, espectacular y grande arresta a panchito, y que es tan enorme que le provocaron la muerte a su padre Francisco González Vázquez.
Ricardo Raphael añade: Debió ser un momento surreal, como parafraseando a Octavio Paz o Julio Cortázar, donde el sujeto que persiguió se convierte en perseguido. Debiera llevar el guion a Alfonso Cuarón. El periodista afirma que tratan de destruir los cuatro años en los que González Arredondo “encarnó” la voluntad del pueblo de Chihuahua en su repudio contra la corrupción.
Esta última afirmación no es surreal, sino de un realismo mágico al puro estilo de García Márquez (esto es mío) y que ahora todo es una venganza que ordena la gobernadora Maru Campos, porque González Arredondo logró meter tras las rejas al exgobernador Duarte y fue parte de la investigación de la nómina secreta en la que Maru habría recibido un soborno por más 8 millones de pesos a cambio de que apoyara iniciativas legales del gobierno duartista.
Me da la impresión de que el artículo lo escribió Javier Corral y le pidió el favor a Ricardo Raphael. No es su estilo. Ricardo Raphael es mejor que eso.
No cabe duda, Javier no tiene amigos, pero tiene de su lado personas de su cofradía o secta que engañan a Raphael, a Anabel, a Álvarez De Icaza, etc. En cuanto a Carmen Aristegui, la pasión con la que defiende a Corral no necesita explicación ni adjetivos. Cinthya Chavira tiene mejor información que nadie, pues fueron cinco años de sufrimiento y mentira.
