Un plan B mal hecho, un balazo en el pie
Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- El presidente nunca necesitó una reforma electoral para que la 4T tuviera oportunidad en 2024. Incluso con y sin reforma tiene casi segura la continuidad.
Es común que el poder haga perder el piso a cualquiera; un mal recuerdo o el odio son acicate para darse un balazo en el pie. Primero, apostó a doblegar una vez más a la rémora de “alito” y la reforma no pasó, porque a alito le hicieron entender que solo lo usaría y luego tiraría el protector, y que la única defensa para no ser un objeto estaba del otro lado.
Luego, el Plan B resulta con fallos de apuro y estupidez del líder Mier, de Morena, que concedió, sabiendo que AMLO no estaba de acuerdo, la vida eterna al Verde y al PT. Recularon los verdes y con el Senado ya en receso quitar un párrafo la mandó hasta febrero. Algunos piensan: ¡¡Cuestión de esperar!! Este opinador no piensa lo mismo.
El caso de Yasmín Esquivel se debe observar como una afortunada circunstancia, no para ella, que pone en aprietos a la UNAM, sino también a la SCJN que ahora no podría, creo yo, solo mandar al cajón ese expediente para dejar hacer dejar pasar, ni apoyar a AMLO con los 4 votos para evitar el rechazo al Plan B.
Los ministros de la Corte son 11 y se requieren 8 para echar abajo ese Plan B, sin Yasmín Esquivel, solo tienen 3 votos seguros. La interrogante es: si Yasmín Esquivel renuncia a tiempo para que el presidente proponga otro(a) ministro(a), ¿alcanzaría el tiempo para detener a los 7 ministros que podrían rechazar el Plan B?
La ley señala un mes para que el presidente proponga una terna al Senado y de ahí se elija a quien sustituya a Yasmín. El proceso también puede tener complicaciones, pero dejemos ese detalle pendiente.
Una pregunta obligada: ¿Se atrevería Yasmín Esquivel a seguir asistiendo pasado el periodo vacacional? ¿La UNAM resolverá pronto o calculará los tiempos para amarrarle las manos al presidente y que no pueda sustituir a Yasmín a tiempo? Entendidos de que la UNAM también hace política.
Si la SCJ sesiona cuando Yasmín se dé por vencida y renuncie y rechazan ese Plan B, ¿el Presidente podría perder esta partida por ese error propio de villamelones pero con pretensiones de agradarlo por parte de Mier?
¿Si nada de esto necesitaba, si con el INE ganó todo, por qué meterse en semejante despropósito, sin ver el alto costo político?
El hubris e hybris del poder los obnubila y los empuja a errores impensables. Este lío podría dejar todo como estaba, menos a Yasmín Esquivel Mossa que lo ha perdido todo. Aunque podría presentarse a título de suficiencia o volver a cursar la carrera.
Por cierto, antier, a los 67 años, murió el ex secretario de Educación destituido por firmar con facsímil el título de doctor sin haber realizado los trámites en Harvard para certificar su grado, aunque sí contaba con los estudios. Corrigió ese trámite y siguió su vida. RIP.