En plena antesala al proceso electoral del 2023 en algunos estados claves y de cara a las elecciones presidenciales del 2024, finalmente, al gobierno federal se le ocurre voltear a ver al ex presidente Enrique Peña Nieto y hoy, ya lo investiga por operaciones financieras presuntamente irregulares realizadas desde que dejó el poder.
Llamó la atención del gobierno, las transferencias recibidas por un familiar, entre el 2019 y 2021 por un monto de 26 millones de pesos.
La operación se hizo de México hacia España, país donde radica Peña Nieto y donde por cierto, tiene inversiones comerciales.
El presidente de la unidad de inteligencia financiera, dijo que el ex mandatario, es socio de una empresa que funciona como fondeadora y de una más que recibió contratos de la federación por más de 10 mil millones de pesos durante los años que estuvo en el poder.
Al respecto, el ex mandatario señaló que presentará a detalle, si se lo permiten, pruebas de que su patrimonio es de procedencia lícita.