Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- Enrique De La Madrid escribió, hace unos días en un periódico nacional, sobre su propuesta para un gobierno de coalición, única potencial oportunidad de ganar en 2024, opinó sobre los ajustes que México necesita y cree que generar diálogo e intercambiar ideas es muy importante para la democracia.
Sabe, como muchos de nosotros, que la sociedad está polarizada y dividida, por un odio irracional que se siembra desde el partido en el gobierno, esa división está entre los que creen que el gobierno de López Obrador va por buen rumbo y los que creemos que está llevando al país a un franco retroceso, que costará muchos años reparar.
Enrique señala que los que creemos que AMLO va de mal en peor, somos la oposición, pero está convencido de que más allá de los partidos, hay una gran parte de la sociedad que ya no cree en los partidos, ni en los políticos, al igual que ya tampoco creen ni confían en el gobierno, sea cual sea su origen, pero que ahora pueden unirse a una cruzada para salvar al país de ese hoyo negro al que nos están llevando.
Enrique confía en la sociedad, esa parte de mexicanos que tiene miedo, que no entiende lo que se está haciendo con su país y que quiere participar activamente para enmendarlo, pero Enrique De La Madrid está convencido de que los partidos de oposición necesitan entender que para que eso pase, se requiere de un esfuerzo para unirse sin pelear por quién pone al candidato, sin egoísmos de pretender ir solos creyendo que son una opción, porque eso nos llevaría a dividirnos más y pulverizar el voto para que, al final, resulte favorecido Morena.
Por ello, propone un gobierno de coalición en donde quien sea el candidato sea capaz de comprender la problemática en la que vivimos y que la unidad tiene que ser total; unirnos para salvar o rescatar al país, entendidos de que si se consigue ganar la presidencia no se ejercería el poder como lo han hecho los presidentes anteriores, sino que ahora sería un gobierno de coalición que comparta las dependencias del gobierno de forma proporcional a los votos de cada partido y la contribución de los grupos sociales que se incorporen.
La otra manera sería que Morena le gane a Morena, así que debemos tener claro que si la extrema izquierda se apodera de Morena, la candidatura y ganan otra vez la Presidencia, seguiremos en el camino crítico en el que ya estamos.
Por el contrario, debemos aprovechar la obligada división de Morena para ganarles, estamos convencidos de que una gran parte de Morena no seguirá a la izquierda extrema, y para atraerlos solo sería posible si nos unimos todos, teniendo como único objetivo: Salvar al país con un gobierno que marcaría un antes y un después, como el de coalición que propone Enrique De La Madrid.
Los desertores de Morena pueden ser cooptados por uno de ellos, que dé apariencia de moderado o diferente a López Obrador, pero no debemos caer en la trampa, la única solución es la unidad de la sociedad y los partidos de oposición, con los acuerdos previos y claros, al igual que un reglamento para resolver diferencias a la hora de compartir posiciones en el gobierno de coalición.
Un nuevo concepto
¿Qué es el lujo? Creímos que el lujo era lo costoso, la moda, lo exclusivo, incluso lo raro o extravagante; en resumen, casi todo lo que era inalcanzable para la mayoría. Ahora muchos hemos entendido que el lujo son otras cosas, pequeñas, si quieren pensar que lo son, pero no es así. Son grandes y maravillosas: Lo que ocurre es que a veces no nos damos el espacio para valorar en su justa dimensión lo que tenemos.
Un lujo es estar sano; otro lujo es no estar o tener que ir a un hospital; lujo es caminar a la orilla del mar, de un río o de un sencillo lago y disfrutar de la naturaleza; lujo es disfrutar del olor de la lluvia, ese Petricor es inigualable; lujo es ser educado y tener respeto por los demás; lujo es preservar los valores de nuestros abuelos y de los padres; lujo será cuando podamos andar por donde sea sin usar la mascarilla y respirar sin la incomodidad; lujo es reunirse en familia o con los amigos.
Lujo es tener un empleo en donde hagamos lo que sabemos y que nos haga sentir, aún en el cansancio, una satisfacción; lujo es vernos cada día, abrazarnos y dar o recibir un beso a o de quien amamos; lujo es sonreír, lujo es ver el amanecer o el atardecer; lujo es el despertar cada día; lujo es poder amar.
Lujo es estar vivos y disfrutar de nuestra breve estancia en este mundo. Ser pobre es una circunstancia, no es un designio ni una condena, si nos esforzamos, todos, cada quien en lo que le toca, seremos menos pobres cada día.
Es un lujo ayudar a los que menos tienen. La pobreza extrema no se justifica, son muchos factores, pero el principal es quedarse en el círculo vicioso y no hacer nuestro mejor esfuerzo, nadie debe conformarse, todos tenemos que hacer el mejor esfuerzo para emerger.
Hay gente tan pobre que lo único que tiene es dinero, porque algunos no saben amar, ni están sanos y no disfrutan del día a día persiguiendo al dios dinero. El lujo no pelea con aspirar y soñar con darnos y dar una mejor vida a la familia. El secreto de estos lujos es ir por el sendero correcto, porque quien lo hace recibe todo por añadidura.
El premio de ir por el mundo haciendo lo correcto llega solo. De lo contrario pasaría lo que escribió Dante en la Divina Comedia: si no vas por el sendero te pasará lo que a la espuma en el mar y al humo en el aire: te irás sin dejar huella.



