Ahora es cuando chile verde le has de dar sabor al caldo… En estos momentos tan críticos que hemos vivido en nuestro país es cuando salta a la vista todo aquel que tiene madera de líder, que le importa su gente o que le gusta su oficio de servidor público, como todos a los que hemos visto patrullando las calles para contener la violencia.
¿En dónde están todos esos políticos que andan recorriendo el país para darse a conocer y lograr las candidaturas a la presidencia de la República en el 2024, aunque el INE diga que son actos de campaña anticipada?
¿Dónde están esos senadores, diputados federales y locales que se desgarran las vestiduras en cuanto les mencionan que se les van a recortar sus gastos personales y viáticos; esos que se dicen oposición y se unen para rechazar reformas en la Cámara de Diputados o peor aún, dónde están esos diputados federales que andan en el extranjero acompañando y defendiendo a su líder corrupto?
Éste es el momento en que estos políticos y servidores públicos deberían demostrar empatía y solidaridad, apoyando a todas las víctimas de los ataques de violencia que estamos viviendo en varias ciudades de la república.
Éste es el momento ideal para quienes andan en campaña de visitar las ciudades que están siendo amedrentadas a base de actos terroristas y plantarles la cara a los criminales advirtiéndoles que van a legislar leyes más duras contra los que se dedican al narcotráfico, extorsión y homicidios dolosos.
Éste es el momento en que todos esos líderes y los que se dicen “lobos de mar de la política mexicana” deberían acercarse a las familias de las víctimas para apoyarlos con gastos de hospitalización y funerales, en lugar de estar enviando cartas a través de las redes sociales al presidente desde la comodidad de su casa, como lo hacen Dante Delgado y Porfirio Muñoz Ledo.
Mejor han sacado la casta los dueños de las funerarias en Ciudad Juárez al ofrecer los servicios funerarios gratis para todos los juarenses que murieron en la barbarie que vivimos este jueves pasado.
Este es el momento para que los políticos demuestren que merecen servir a nuestro país y que no solo están buscando servirse de él como lo están haciendo quienes en este momento han permitido tanta impunidad e inseguridad en nuestro México al que dicen amar tanto.
Nada tiene valor para quien nada le cuesta… Para ser un buen carnicero, hay que conocer los cortes que pueden salir de un animal y el valor de dichos cortes. Si mandas a un abogado a destazar un animal, a lo mejor ni el cuero le sabe quitar y cortará igual del cuello que de la costilla y de la pierna.
En una cirugía en donde sea necesario arreglar el ventrículo izquierdo de un corazón, resultaría inútil encargarle el trabajo a un contador, por muy buen contador que sea ¿qué puede saber de corazones?
¿Por qué entonces nuestros gobiernos se empeñan en improvisar profesionales en el servicio público? ¿Qué sabe un ingeniero mecánico de la valoración de los sectores sociales que determinan tal o cual conducta delictiva? ¿Qué sabe entonces de impedirlas o disminuirlas? ¿Qué sabe de investigaciones y victimología o penología? ¿Tienen acaso conocimientos de medicina forense? ¿Ya le explicaron de Sociología Jurídica?
Tenemos a un secretario de Seguridad Pública Estatal que este lunes declaró: “La ciudad ya está en una relativa calma, solo quedan hechos aislados sin importancia”. Tan desafortunadas declaraciones las dio al salir de la reunión de las mesas de seguridad que han demostrado no servir para nada.
A tan distinguida autoridad de Seguridad Estatal, los más de 14 muertos durante el fin de semana no le afectan y con una gran insensibilidad minimiza el dolor de las familias juarenses que están sufriendo al igual que los comerciantes que perdieron sus negocios.
Pero el dicho mexicano encierra toda la verdad en el refrán “no tiene la culpa el indio sino el que lo hizo compadre”, lo cual quiere decir que viendo lo que se ve y escuchando lo que se escucha, en Palacio de Gobierno las cosas andan igual o peor.
Le echan mucha crema a sus tacos… Las autoridades federales y estatales en Coahuila han querido mantener la imagen de que de alguna forma tienen controlada la situación de la mina en Sabinas, ojalá y sea cierto, pero 10 días después, el optimismo más férreo se desvanece.
Ayer nos declaran que ya están dadas las condiciones para intentar rescatar a los diez mineros que están bajo tierra. Esperamos que la misericordia de Dios los acompañe y los ayude a vencer este obstáculo en sus vidas.
Cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar… España, una vez orgulloso país agroindustrial de Europa, ofrecía sus vinos de mesa, sus quesos, sus aceitunas y por lo tanto su muy apreciado aceite de oliva, su jamón serrano, en fin, miles de delicias que ya no tendrá para ofrecer porque los jóvenes abandonan las zonas rurales en bandadas, todos ellos prefieren vivir de obreros en las grandes ciudades como Madrid, Sevilla, Barcelona, Valencia o Bilbao y los campos agrícolas se están quedando en manos de adultos mayores, pero ¿por cuánto tiempo más?
Ahora traslademos este ejemplo a nuestro México, los jóvenes huyen de la inseguridad que azotan los cárteles de droga, que se han enseñoreado de los campos, se han cansado de los sueldos de miseria que reciben y están prefiriendo buscarse la vida en las grandes ciudades o emigrar a Estados Unidos de Norteamérica y Canadá.
¿Quién cuidará ahora los campos mexicanos? ¿Por cuánto tiempo? Poco a poco todos abandonarán el campo que tantos sinsabores e inseguridad les están brindando.
Cuando el cataclismo poblacional se dé y la baja en el producto interno bruto del país se sienta, ¿qué remedios querrá imponer el gobierno? ¿Qué incentivos ofrecerá a quien quiera regresar al campo? Pero, muy importante ¿quiénes tendrán la capacidad y el conocimiento para volver a hacerlo productivo? La pregunta que a mí más me agobia ¿quién creerá en un gobierno que por décadas ha sido tan insensible con los productores del campo?.