WASHINGTON- Mauricio J. Claver-Carone, un alto funcionario de la Casa Blanca, fue elegido para encabezar el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en medio de una fuerte oposición de países latinoamericanos y expertos de alto rango.
Claver-Carone, quien sucederá al actual presidente Luis Alberto Moreno, tomará posesión el 1 de octubre para un período de cinco años, informó el BID en un comunicado.
El BID, ante grandes presiones de Estados Unidos, tendrá un presidente no latinoamericano por primera vez. Desde su creación hace 61 años, todos los miembros han seguido una tradición no escrita de que sólo los latinoamericanos administran el banco. Estados Unidos nunca antes había nominado a un candidato suyo para presidir el puesto.
Argentina, Costa Rica, Chile y México, que quieren asegurar que se mantenga esta tradición, insistieron en posponer las votaciones hasta marzo, argumentando que la pandemia impide una elección cara a cara como es apropiado.
Argentina y Costa Rica habían presentado candidatos alternativos en un esfuerzo por mantener al banco en manos latinoamericanas, pero ambos se retiraron en los días previos a la votación después de no recibir el apoyo adecuado.
Claver-Carone es actualmente asistente adjunto del presidente de Estados Unidos Donald Trump, así como director sénior de Asuntos del Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional.
Anteriormente se ha desempeñado como representante de Estados Unidos ante el Fondo Monetario Internacional y asesor principal del subsecretario de Asuntos Internacionales en el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
La polémica votación se llevó a cabo después de que varios ex funcionarios estadounidenses, entre ellos el ex presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, y el ex secretario de Estado de Estados Unidos, George Shultz, presionaran a principios de este mes para persuadir a los accionistas del BID de posponer las elecciones hasta el próximo año.
“El Sr. Claver-Carone es un designado político de la Casa Blanca de Trump cuya polémica nominación rompería un antiguo precedente de presidentes latinoamericanos del BID”, rezó una declaración conjunta.
Argumentaron que elegir a Claver-Carone para un mandato de cinco años sólo unas semanas antes de las elecciones presidenciales de Estados Unidos “desencadenaría una crisis institucional inmediata en el BID y pondría en peligro el apoyo de Estados Unidos al banco”.
Establecido en 1959, el BID busca financiar proyectos viables de desarrollo económico, social e institucional y promover la integración comercial regional en América Latina y el Caribe.
Xinhua