La sospecha es indicio de un alma baja; el que desconfía de todos, es digno de que nadie confíe en él. Antonio Machado, poeta sevillano
Cuauhtémoc Monreal Rocha.- Lector(a) “amabilis”, espero que con la puesta del semáforo en color naranja por el góber de Chihuahua, no te hayas soltado el pelo y andes de lingo lilingo por los restaurantes de la ciudad, porque el Covid-19 aún existe, aún está vivo y te puede dar un susto que pa’ qué te cuento.
Quédate en casa, ya habrá tiempo para que le des vuelo a la hilacha con el viejo(a), con tus compañeros(as) de trabajo si es que trabajas o con tus amigas(os): “remember”: Hay más tiempo que vida.
Ya alertados, vayamos al tema y ubiquémonos en el arcaico caserón de Palacio Nacional donde habita el viejo guardián, ustedes ya saben quién. Y rápido y veloz, nos surge la pregunta que, seguros estamos, también ustedes lectores(as) se habrán hecho: ¿Votaron por don Manuel para Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos o votaron para que, llegado el tiempo de las elecciones intermedias de 2021, se convierta en guardián constitucional de las elecciones u operador político de Morena? ¿Verdad que no?
Porque hasta donde nosotros sabemos, como simples “escrebidores”, hay un organismo encargado, a un alto costo económico y con muchos vicios si se quiere, de vigilar todo tipo de comicios dentro del territorio nacional que, por sus siglas en español, INE, quiere decir: Instituto Nacional Electoral, que debe estar atento a que se respete el voto de los ciudadanos, quienes sí deben ser guardianes o celosos vigilantes del proceso electoral, para evitar todo tipo de fraudes o triquiñuelas.
Y hay que ser claros, el viejo de Palacio no tiene facultades constitucionales para convertirse, nomás por sus dídimos (o pasitas) en guardián de nada; si de veras AMLO quiere ser un guardián efectivo de la nación, debe ser también un guardián efectivo de la seguridad de todos los mexicanos, pertenezcan al pueblo que pertenezcan, sabio o no.
Debe ser un guardián efectivo de la salud de todos los mexicanos y severo guardián para que no falten, en ninguna época del año, los medicamentos necesarios ni en el IMSS, ni en el ISSSTE, ni en la Secretaría de la Salud o como la llamen en este sexenio de la 4T.
Pues estos renglones, seguridad y salud, son prioritarios para que los mexicanos trabajen sanamente y con seguridad, tanto al ir a su trabajo como al regreso del mismo y los inversionistas, mexicanos y extranjeros, puedan invertir su dinero sin riesgo alguno y no cambiarles por simple capricho gubernamental, las reglas del juego y de esta manera, México, dentro de su perenne subdesarrollo, pueda transitar a un mejor modo de vida para sus ciudadanos y se pueda transformar y modernizar, acorde a sus necesidades de quinto mundo.
Si tú lector(a) estás de acuerdo con lo anterior, bien, y si no también, para eso tienes libertad de pensamiento y libertad de expresión y no permitas nunca que te digan que estos derechos son una graciosa concesión del fetiche Estado o de gobernante alguno, así se quiera convertir “ad chalecum” en guardián de las elecciones venideras. Vale.