Aída María Holguín Baeza.- A mediados de 2022 la UNESCO anunció el inicio de un proceso de consulta mundial sobre la regulación de las plataformas digitales para, con ello, establecer una serie de normas globales para mejorar la fiabilidad de la información en internet.
El proceso comenzó a finales de 2022, cuando la UNESCO publicó la Guía para la regulación de las plataformas digitales que estuvo disponible para una primera consulta en línea que concluyó en enero de 2023.
Luego, a finales de febrero de 2023, en el marco de la conferencia mundial “Por un internet confiable”, se puso a consulta, por segunda vez, el proyecto de las ya entonces denominadas “Directrices para la regulación de las plataformas digitales”.
Después, en agosto de 2023, para agregar la participación de los grupos que no habían podido participar en la primera y segunda consultas (en su mayoría del sur global y de comunidades vulnerables y marginadas), con la ayuda de la fundación i4Policy se implementó una tercera consulta con enfoque deliberativo de la que emanó la tercera -y penúltima- versión de las Directrices.
Finalmente, en noviembre de 2023, la UNESCO publicó las ahora llamadas Directrices para la gobernanza de las plataformas digitales, resultado de las tres consultas en las que participaron más de 4,000 representantes de gobiernos, organismos reguladores, empresas digitales, círculos académicos y sociedad civil de 134 países.
Total que, a tan solo 18 meses de iniciado el proceso de consulta mundial, ya contamos con Directrices que describen los deberes, responsabilidades y funciones de los Estados, las plataformas digitales, las organizaciones intergubernamentales, la sociedad civil, los medios de comunicación, el mundo académico, la comunidad técnica y otras partes interesadas para crear un entorno seguro y confiable.
Ahora, en el camino hacia la regulación de las plataformas digitales, la UNESCO y representantes de 124 países, entre ellos de redes nacionales y regionales de reguladores, de plataformas digitales, de gobiernos, de organismos de gestión electoral y de la sociedad civil, se reunieron por primera vez (en Croacia) para crear una red mundial que coordinará la regulación de las plataformas digitales, a fin de construir una internet confiable que preserve la libertad de expresión, el acceso a la información y otros derechos humanos en el ámbito de la gobernanza de las plataformas digitales y su tratamiento de contenido que puede ser restringido bajo las regulaciones y estándares internacionales de derechos humanos.
A modo de resumen contextualizador, concluyo citando lo dicho por la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay: La liberación de la palabra a través de la tecnología digital ha representado un inmenso progreso. Pero las redes sociales también han acelerado y amplificado la difusión de información falsa y la incitación al odio, lo que plantea graves riesgos para la sociedad, la paz y la estabilidad. Para proteger el acceso a la información, debemos regular sin demora estas plataformas, protegiendo al mismo tiempo la libertad de expresión y los derechos humanos.
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