Benjamín Carrera.- Cada 21 de marzo se conmemora el Día Mundial del Síndrome de Down, discapacidad que surge a raíz de una división celular anormal que produce una copia adicional del cromosoma 21, material genético extra que provoca cambios en el desarrollo y en las características físicas, volviendo a este síndrome la causa más común de discapacidad alrededor del mundo.
Irónicamente, la debida atención a las personas que lo presentan es aún deficiente y requiere de una suma de voluntades a la que todavía hay autoridades que anteponen intereses que parecieran personales, muy a pesar de ser la clave para cambiar radicalmente la calidad de vida y dar mayor acceso a oportunidades no solo para las personas que lo presentan sino para las familias que las apoyan.
Si bien, a nivel federal, la Secretaría de Salud cuenta con diversas instituciones que atienden el Síndrome de Down y aunque la Organización Mundial de la Salud estima que las niñas y niños que presentan alguna discapacidad cuentan con menores oportunidades de escolarización, a la fecha, en Chihuahua, por medio del Programa del Gobierno Federal “La Escuela Es Nuestra” y a través de 33 Centros de Atención Múltiple, se brinda educación y atención integral a niñas, niños y adolescentes con alguna discapacidad, trastorno del desarrollo o condición que dificulte su ingreso a centros educativos regulares, destinando al cierre de 2022 recursos federales por un total de $ 8,150,000.
De igual manera, en los Centros de Rehabilitación e Inclusión Infantil Teletón, gracias al Programa de Apoyo de Rehabilitación e Inclusión para el Bienestar, se brinda a niñas y niños con discapacidad, un servicio integral producto de la alianza del Gobierno de México a través de la Secretaría de Bienestar y la Fundación Teletón. De acuerdo con las cifras para 2022, se atendió a un total de 45,443 niñas, niños y adolescentes, lo que implicó una inversión para ese año, de cerca de 22 millones de pesos
Es a través de estos Centros que el Gobierno Federal asume la responsabilidad que debería tener todo nivel de gobierno, de brindar educación por medio de adecuaciones curriculares significativas y apoyos generalizados permanentes, a los que se suma la Pensión para el Bienestar para Personas con Discapacidad, que al mes de febrero de este año se otorga a 27,610 personas, traduciéndose en una inversión de casi 81 millones y medio de pesos.
Sin embargo, pocos datos encontramos acerca de programas del Gobierno del Estado para apoyar a personas con discapacidad; pareciera que la soberbia está por encima de los intereses de la ciudadanía sobre todo en cuestión de salud, ya que al momento persiste una firme negativa a la adhesión al Instituto de Salud de Bienestar implementado por Gobierno Federal y que, sin duda, permitiría a brindar una mayor atención a la población chihuahuense.
Quizá deberíamos tomar esta conmemoración como un recordatorio de que la cantidad de cromosomas no es capaz de definir a una persona, pero las omisiones de la autoridad para con las personas que se encuentran en desi-gualdad de condiciones, sí son capaces de definirla.
