Se trata de una jirafa de tres años de edad proveniente del Zoológico de Culiacán Sinaloa “Fiesta Safari”, nacida un 28 de diciembre.
La nueva criatura, se suponía sería una sorpresa para el el pulmón de Juárez, no obstante, esta fue descubierta cuando asomó la cabeza en una gasolinera de Samalayuca; al lado de un puesto de asaderos.
El nuevo animal, mismo que ocupará el hábitat que era de Modesto, tocó tierra en esta frontera la tarde de ayer y ya reside en el área verde.
Todavía sin nombre, el animal que no ha llegado a su máxima altura, será bautizado por los niños juarenses por medio de un concurso a realizarse en las próximas semanas.
Pese a esto, la jirafa ya quedó con more a petición de la mayoría de las fronterizas quienes obraron por nombrarla “Cheeto”.
