Daniel Valles.- Los opinadores debemos reforzar lo que afirmamos con nada menos que certeza, el elemento que le da a la verdad el valor que requiere y trasciende a la mente de quien recibe la opinión de quien la emite, lo que provocará se dé el conocimiento y con ello la educación misma.
Cada semana la Junta Municipal de Agua y Saneamiento envía a un lugar llamado “Los Kilómetros”, 13 millones de litros de agua en pipas, la que es distribuida de manera gratuita a razón de 2 mil litros por familia, dos o tres veces a la semana.
Los números del Lic. Ricardo Cordero, jefe del departamento de pipas de la J+ y que entregó la semana que recién terminó, dicen que del pozo 152R, lo que es lo mismo a las “Garzas Alcaldes”, surten en promedio diario en pipas propias: 1 millón 850 mil litros y del pozo 255 se suman 500 mil litros más para un total de 2 millones 350 mil litros diarios. Agua que se reparte entre 32 mil 500 personas.
Esto es una gran cantidad de agua para mucha gente que la J+ atiende desde hace años.
Las colonias llamadas “Los Kilómetros” nunca han tenido agua en red. Y es un proyecto de la presente administración el dotar de ésta, antes de que termine el sexenio estatal.
La gente de las colonias no sufre tanto por la carencia del líquido sino por la falta de red, principalmente. Es cierto, en esta época de calor hay una sobredemanda que hace que se pueda llegar a tener problemas. Pero no en la distribución. ¿Por qué?
La J+ tiene cuarenta (40) pipas en servicio que cubren cincuenta rutas establecidas por semana. ¿Entonces, por qué se tiene la percepción de que hay gente que no recibe agua? ¿Por qué se llegan a manifestar afuera de la oficina central de la J+?
La respuesta es sencilla para quienes la conocen y saben “cómo corre el agua” en los Kilómetros, Lomas de Poleo y Ampliación San Isidro. Quienes no lo saben, escuchan opiniones diversas, las que pueden tener su verdad, pero nada de certeza.
La gente que no recibe agua es porque no está aún en el censo de personas que la requieren. ¿Y por qué no están en el censo? Porque tienen poco tiempo que llegaron a vivir a ese lugar y porque deben avisar a la J+ mediante una carta para que sean tomados en cuenta en el censo. Y ya se trabaja en un nuevo censo.
Cada semana la J+ atiende a 6 mil quinientas familias, lo que significa un total de 32 mil 500 personas. Lo que no es tomado en cuenta por algunos líderes políticos que con una treintena de personas a las que manejan, van y se manifiestan a la oficina central aduciendo que la gente no tiene agua y que se violan sus derechos humanos, lo cual dista mucho de ser cierto.
¿Y las tapas de alcantarillas, qué pasa con ellas? ¿Se desmoronan? Claro que no. Se desmoronó el cemento que cubría el derredor de una de ellas debido a que los vecinos de la cuadra donde se colocó una tapa, pisaron la mezcla antes de que secara. Un par de medios se dieron cuenta de ello. Reportaron lo que a la vista parecía. Pero no se fijaron bien. La realidad es que era solamente el cemento y no la tapa.
Uno de los medios publicó una nota donde aclaraba el hecho, lo que es de profesionales hacer, pero otro, uno de tono muy “amarillo” gritó: “¡fraude millonario!” en su deseo de alimentar con imágenes y sonidos a quienes con un mínimo esfuerzo forman opinión con base en estas ligerezas.
Quienes consumimos información sabemos que una opinión es eso y nada más. Pero cuando la opinión va cargada de certeza, se transforma en una verdad auténtica de la que se puede desprender conocimiento auténtico. A lo que Platón llamaba ciencia.
(*) Daniel Valles, es Jefe de Comunicación Social de la J+
Correo: dvalles@jmas.gob.mx
