El recinto barcelonés del Palau Sant Jordi acogió un evento experimental durante el cual miles de personas disfrutaron de la música “sin distancia social y en un entorno seguro”.
El concierto del popular grupo de rock Love of Lesbian busca “establecer un nuevo protocolo para la celebración de eventos en el contexto actual”, afirman los organizadores. Unas 5 mil personas que acudieron al evento tenían que llevar mascarillas FFP2 y hacerse un test rápido de COVID-19 unas horas antes del concierto.
Asimismo, cada uno de los asistentes firmó un documento según el cual autorizaba el seguimiento médico durante los 14 días posteriores al espectáculo. De esta manera, las autoridades de salud pública buscan determinar el riesgo de contraer el coronavirus en un evento así.
Solo seis de los 5 mil asistentes dieron positivo y fueron excluidos de este espectáculo realizado a modo de prueba piloto.
Esta es la primera vez en más de un año que la banda española sube al escenario.
“El mundo nos está mirando”, declaró el líder del grupo, Santi Balmes, a la multitud.
Distintos políticos catalanes quisieron apoyar con su presencia la iniciativa, como la consejera de cultura de la Generalitat de Cataluña, Angel Ponsa, y la teniente alcalde de Barcelona, Janet Sanz.
La plataforma organizadora del evento hará un estudio con los asistentes en colaboración con el Departamento de Salud del Gobierno regional catalán, cuyos resultados se comunicarán el 10 de abril.
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