WASHINGTON- La decisión del gobierno estadounidense del Tratado de Cielos Abiertos, un importante acuerdo internacional de control de armas, ha causado varias reacciones de países miembros, entre ellos Rusia y China, sus principales opositores.
“La salida de Estados Unidos representa una amenaza para la viabilidad del acuerdo”, dijo el diplomático ruso Peskov en su sesión informativa diaria, en la cual describió el pacto como “un vínculo vital” que ayuda a fortalecer la confianza mutua en el control de armas.
Moscú buscará la firme garantía de que los Estados restantes del tratado cumplirán sus obligaciones, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia en un comunicado.
Por su parte, China lamenta profundamente la insistencia de Estados Unidos en retirarse del tratado haciendo caso omiso de la oposición de la comunidad internacional, afirmó el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian.
El portavoz comentó que la decisión de la parte estadounidense dañará la confianza militar mutua y la transparencia entre los países en la región y no favorecerá a la seguridad y estabilidad regionales.
“La decisión afectará de manera negativa al control internacional de armas y el proceso de desarme”, agregó Zhao.
Xinhua



