Inicio LA OTRA NORMALIDAD Ver al futuro

Ver al futuro

Jorge Quintana Silveyra.- Ante la falta de un proyecto de país, y con una clara visión de victima permanente del pasado, el Presidente de México, se empeña en buscar en el pasado los culpables de su incapacidad para gobernar.

Ha vuelto a insistir en la necesidad de que España pida disculpas a México por los crímenes de la conquista, que según su óptica nos han dañado para siempre y exige esa disculpa, negando la historia de las relaciones bilaterales de ambas naciones, mostrando una arrogante actitud, para quedar bien con su esposa, ignorando al resto de los mexicanos.

Pero así ha sido todo el tiempo de su permanente campaña electoral, pues se ha olvidado de sus deberes como presidente, para embarcarse en una estrategia diaria de descalificar a todos los que no están de acuerdo con él y su política.

Con la mano en la cintura descalifica  y pretende estigmatizar a quienes se manifiestan en desacuerdo con la forma de gobernar y  de concebir el poder de la cuarta transformación.

En los hechos se manifiesta su afán de concentrar las decisiones y sobre todo, la manera de tratar a los otros poderes del Estado, como súbditos y desgraciadamente, lo está logrando.

Las instituciones que otrora fueron orgullo de nuestra nación, hoy están haciendo el ridículo, como vasallos del tlatoani, que pretende gobernarnos.

Los embrollos en que se meten algunos ministros de la Suprema Corte de Justica, para enmendar los errores del Presidente y permitirle que se salga con la suya, atropellando los principios fundamentales del Derecho, son una muestra evidente de su afán de trascender como el Presidente más soberbio de la historia.

Su insistencia en nombrar en las carteras del ejecutivo federal a personas con escasa preparación y nula visión de la importancia del sector que dirigen, están sumiendo al país en el peor de los fracasos, económico, social, educativo y de salud.

La violencia e inseguridad nos están llevando a un plano de incertidumbre que no deja dudas sobre la catástrofe que se cierne sobre nosotros, y, sin embargo, se refiere al ahora extitular de la Secretaria de Seguridad, como un funcionario, recto honesto y trabajador, los números dicen todo lo contrario.

El presidente de México no está viendo al futuro, esta volteando al pasado, creyendo que la solución de los problemas esta en fincarle la culpa a los gobiernos anteriores, para que nadie se fije en las torpezas de su gobierno.

Evidentemente está cumpliendo su promesa, la que hizo en alguno de sus comentarios, cuando fue candidato a la Presidencia de México, en elecciones pasadas: “a la chin… las instituciones”. 

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