MONTEVIDEO- La inflación en Uruguay se moderó a 10,13 por ciento en el año móvil con cierre en julio, desde un 10,36 registrado en junio pasado, con una fuerte influencia de una suba marginal del rubro de alimentos, informó el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En julio, el Índice de Precios al Consumo (IPC) tuvo un alza de 0,55 por ciento (0,76 en julio de 2019) y en los primeros siete meses de 2020 acumula una suba de 7,37 por ciento (6,07 en igual lapso de 2019).
Las principales divisiones que incidieron en la última variación mensual al alza fueron “Alimentos y Bebidas no Alcohólicas (0,01 por ciento), Salud (0,10), Recreación y Cultura (0,09) y Educación (0,19 por ciento), según el INE.
El IPC había alcanzado en abril los dos dígitos (10,86 por ciento) por primera vez desde julio de 2016 (10,05), como efecto de la suba del tipo de cambio, el aumento de bienes transables internacionalmente y la actualización de las tarifas públicas.
Analistas consultados en la última encuesta de expectativas del Banco Central de Uruguay (BCU) pronosticaron una inflación de 0,52 por ciento para julio y de 9,50 para 2020, por encima del techo del rango meta oficial (7 por ciento).
En los próximos días vencerá el “acuerdo de precios” entre gobierno y empresarios anunciado el 8 de mayo en el marco de la pandemia del nuevo Coronavirus (Covid-19), para mantener el valor de 80 productos alimenticios y de higiene durante tres meses con el objetivo de frenar los “aumentos abusivos”.
La ministra de Economía, Azucena Arbeleche, aclaró que la medida “no ataca las causas” de la inflación, y busca facilitar el acceso a productos que habían experimentado fuertes alzas.
Xinhua
