Es un error grave mirar al pasado con los ojos del presente. Antonio Pérez Reverte Gutiérrez, académico español.
Cuauhtémoc Monreal Rocha.- Ni modo, el Viejo del sureste no reconoce los problemas nacionales de ahora, él está en su nube y de allí “naiden” lo baja, problemas que fueron creados en su mandato, en su sexenio, en su cuatro te y culpa, día a día, en su sermón de la montaña, perdón de la mañanera, a sus adversarios, a los conservadores, a los neoliberales, a los aspiracionistas, a los racistas, a los que tienen más de un par de “chanclas” y demás gente del pasado reciente o no tan reciente.
Tá’ bien, quizá así funciona su cerebro que deberá ser estudiado en su momento por los psicoanalistas, los sociólogos y demás gente de ciencia. El hombre de la selva tabasquense, ahora compa de Iberdrola, no entiende que dentro de pocos días, se le acaba su ciclo como… presidente, vamos a escribirlo así o bien, su desastroso sexenio y tendrá, de acuerdo con las leyes que nos rigen (aunque sea la de Herodes), que dejar su palacio virreinal y rendir cuentas, aunque sean de seguridad nacional.
Lo que nos da tristeza es que el Viejo no supo gobernar, porque lo de él, lo de él, es la agitación social, la plaza pública populachera, arengar a las masas y verlas como marionetas, a la indiada, con todo respeto, no nos referimos a las etnias o pueblos originarios. No supo ser Jefe de Estado o simplemente no le dio su real …ingada gana serlo.
El monologuista mañanero, en lugar de practicar la democracia, se ha querido convertir en un vulgar dictadorzuelo, pues se ha dedicado durante todo lo que va de su mandato, a polarizar a todo México, a dividirlo y desde antes de ser presidente, mandó al diablo a las instituciones y ya como dueño del poder, usando toda su soberbia, toda su arrogancia, espetar: Y a mí que no me vengan con que la ley es la ley. ¡Olé!
No somos iguales, repite como disco rayado. ¿Y Segalmex? ¿Y Diconsa?
Se acaba el mandato. Si Peña tuvo sus 43 en Ayotzinapa, AMLO tuvo sus 40 en La Mejor Frontera de México, La H. Ciudad Juárez, donde se dice, se inicia y termina la Patria. Aquéllos, desaparecidos, éstos, quemados. ¿No somos iguales? La historia lo definirá en su momento. Vale.
