Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- Ricardo Monreal tiene que comer camote, no le queda de otra, el frente que abrió contra el gobernador de Veracruz, Xicoténcatl García, le demostró que AMLO no lo tiene en el lugar que él creía y también le dejó claro que su fuerza en el Senado no le alcanza para echarse encima, vía una comisión especial, sobre personajes (gobernadores) que protege el presidente.
Su secretario técnico, José Manuel Del Río Virgen, está en prisión y ahí seguirá hasta que los amparos procedan y habrá que ver si la justicia federal se impone sobre la justicia a modo del gobernador García.
Monreal ya se dio cuenta de que en el momento que quiera el presidente lo puede desplazar de la coordinación de la fracción de Morena en el Senado y así se lo demostró el grupo de 30 senadores que le echaron abajo su comisión especial, en la que ante la presión, su amigo y dueño de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, tuvo que renunciar a la presidencia de tal comisión.
El pleito está cantado y si Monreal pretende que su nombre esté en la boleta de 2024 tendrá que buscar lugar en la oposición. En ese caso no hay más que dos opciones: la de la oposición conformada por PAN, PRI y PRD o MC. En la primera tiene que luchar contra Ricardo Anaya, que de no proceder las acusaciones en su contra, previstas a dilucidarse el día 15 próximo, será uno de los viables a la candidatura entre los tres mencionados partidos opositores.
En la otra opción tiene enfrente al actual gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, que pretende jugarla con ese movimiento en el que le disputa una gran parte de afiliados y simpatizantes a Dante Delgado.
Ahora, es importante mencionar que MC puede unirse en torno a una figura joven que podría generar un fenómeno electoral y ganar la elección presidencial si se anima a entrarle. Esa figura es el hijo de Luis Donaldo Colosio, actual alcalde de Monterrey, que con el solo apellido podría definir la elección.
Nada sencillo el panorama de Ricardo Monreal porque tendrá que decidir si, por su edad, se juega el todo por el todo en la presidencial o negocia irse detrás de Claudia Sheimbaum a la jefatura de gobierno de CDMX. Si se disciplina podría seguir con AMLO, de lo contrario pasará a formar parte de sus opositores.
Seguro que sería acompañado por Marcelo Ebrard, Mario Delgado y otros más, como su hermano, David Monreal, que gobierna Zacatecas. A eso mandaron a la exministra de la Suprema Corte y exsecretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, a poner en orden a Ricardo Monreal, nada más y nada menos.
Terquedades
Marcelo está a unos meses de que lo quiten de Relaciones Exteriores (tal vez lo manden a una embajada), ese premio en Estados Unidos por la denuncia contra fábricas de armas, debió declinarlo en favor de su jefe, porque al recibirlo le quitó los reflectores al patrón y eso no se perdona, amén de otros deslices que lo han bajado del amor presidencial.
Mario Delgado será desplazado de la dirigencia de Morena por ser parte del equipo de Ricardo Monreal. Pero, tranquilos que todo eso pasará hasta que hayan pasado las elecciones de los seis gobernadores que se eligen en este año.
