La educación es el vestido de gala para asistir a la fiesta de la vida. Manuel Rojas Sánchez, pedagogo mexicano
Cuauhtémoc Monreal Rocha.- El fin de semana fue duro, milonguero, boda, tornaboda y cumpleañero, todo en la misma familia. Estamos hartos, cansados, pero ya lo bailao nadie nos lo quita; sin embargo, antes de meternos en nuestro Moisés, hay que cumplirle al director editorial porque joroba más que Cuasimodo, personaje principal de la obra victorina “Le Bossu de Notre Dame de Paris”.
En este México nuestro, no obstante, la revolución de 1910, nunca ha habido un buen sistema educativo y menos en estos tiempos cuatroteros y para colmo de los males, la violencia ha llegado a las aulas, misma que va en ascenso. Padres de familia empistolados o no, contra profesores, llegan como endiablados con perdón de Luzbel o Belial; alumnos contra alumnos; alumnas contra alumnas: profesores contra profesores; acoso sexual en contra de alumnas y maestras y así hasta el infinito.
Los gobernantes post-revolucionarios y transformadores, no entienden, no aceptan, por convenir así a sus aviesos intereses, que la ignorancia es el peor enemigo de un pueblo, de una nación, de un país que quiere ser libre, pues la educación es el alma de la sociedad. Sin educación, la sociedad está perdida y los términos libertad y democracia, dejan de tener significado porque se cae en una dictadura, salvo opinión en contrario.
Los gobernantes y las instituciones educativas en nuestro país, deben entender que el objetivo de la educación es convertir a sus ciudadanos en buenos ciudadanos para que, con el tiempo, no se conviertan en pillos, ratas, zánganos o parásitos del presupuesto, como los gobernantes y políticos de todas layas, que ahora padecemos como nación.
Tal parece que la Secretaría de Educación Pública no existe, está sumida en la política cuatrotera, centrando su atención únicamente en las señales que les envía el Viejo, desde su zona de confort, ubicada en un Palacio.
¿Será por eso que México, en cuanto a su sistema educativo se refiere, está reprobado a nivel internacional? Lo dudamos porque el hombre de Macuspana tiene otros datos. Vale.