Ícono del sitio Juárez Hoy

Responsabilidad afectiva

Daniel Martínez.- ¡Hola! ¡Muy buenos días! Yo soy Daniel Martínez tu Psicólogo y espero te encuentres de lo mejor el día de hoy. Hoy te hablaré de RESPONSABILIDAD AFECTIVA.

Hablar de este tema es un poquito complicado, pues nos obliga a hacernos cargo de lo que está en nuestra cancha, en nuestro poder, con nuestras habilidades, nuestra historia y no es fácil reconocer algunas heridas que habíamos cubierto o ignorado porque duele saber que están ahí, latentes aún.

Sin embargo, es importante hacerlo, por el bien nuestro, pues nadie más se hará cargo de nuestras emociones. Cuando no lo hacemos vamos por la vida vinculándonos con otras personas que a su modo también tratan de hacerse cargo de sus necesidades, también con sus heridas.

En pocas palabras, cada quien hace lo que puede con lo que tiene y pues “está bien”, pero podemos ser un poquito más responsables y no solo justificarnos o hacernos las víctimas de la vida. Bueno, también podemos jugar ese papel… pero es decisión de cada uno de nosotros.

El lenguaje es un gran poder que tenemos que nos sirve para comunicar nuestras necesidades afectivas, es un hecho que no siempre las mismas conductas son reacciones ante los mismos estímulos; por ejemplo, no todos tenemos la conducta de llorar por la misma situación, algunas personas reaccionan así ante algo, mientras otras no, habrá quien reaccione molesto tal vez, en fin. Lo que quiero decirte es que dentro de tu responsabilidad afectiva está lo que haces, lo que dices, lo que expresas e incluso lo que sabes que puedes llegar a causar en otra persona, pero comunícalo, sé responsable.

Los seres humanos somos cambiantes ya que nuestras emociones son momentáneas en muchas ocasiones, esto no significa que no tengamos establecida una personalidad que haga frente a nuestra vida, con ciertos rasgos muy nuestros, aprendidos por lo que hemos vivido o que definitivamente sean cosas que hemos descubierto que queremos lograr de manera personal; sin embargo, es válido que con el paso del tiempo o de lecciones de vida, nos demos cuenta de que algunas cosas que pensábamos o creíamos, las podemos cambiar. 

Todos y todas tenemos creencias aprendidas, metas que creemos que debemos lograr, modelos de cómo relacionarnos, que creemos que debemos seguir, cosas que tienen que ser así porque así nos lo enseñaron, pero está bien cambiar, darte cuenta de que al vivir tu vida, de que tu contexto es diferente al de las ideas que tienes y decidir querer cosas diferentes está bien, tal vez algo ya no te gusta seguir y deseas cambiarlo, eso está excelente, pero hablando de la responsabilidad afectiva, si sabes que tu decisión afecta directamente a alguien, utiliza el poder de tus palabras y comunícalo.

Es válido no querer algo que hace algún tiempo sí queríamos y cuando hablo de tiempo lo dejo a tu consideración, pueden ser, horas, días, semanas o años. Decidir que ya no quieres lo que querías en ese entonces y está muy bien darte cuenta a tu propio tiempo e ir tras lo que ahora sí quieres, pero comunícalo, más que todo por respeto a ti, a tu valía.

Y por supuesto, también ser amable, ser responsable con quien puedas afectar. A esto se le llama también poner límites, salir de tu zona de confort para cumplirte a ti, no hay en la vida persona más importante que tú, no hay cosa más importante que tu salud mental y paz.

Y si tú requieres apoyo especializado con este u otro tema, no dudes en contactarme. A mí me encuentras en Facebook como Psicólogo Daniel Martínez y en YouTube con el #Fronteramental… Y no olvides que tus límites están en donde tú quieras, en donde ubiques… tu fronteramental.

Salir de la versión móvil