Afirma que va en la defensa del régimen de partidos políticos, porque esa es la democracia y México necesita de esos contrapesos políticos para seguir una ruta que garantice progreso. México no es ni debe ser país de un solo hombre
Dr. Fernando Antonio Herrera Martínez.- El senador Ricardo Monreal sigue en la pelea por ser elegido en Morena como su candidato, pero ante lo dicho por Chucho Zambrano, agradeció la deferencia de mencionar públicamente que lo tienen presente como uno de los que compiten para ser el candidato a presidente en el 2024.
Monreal insiste en que será candidato por Morena o nada, pero se le conoce como un gran estratega político y nadie puede ni debe descartar su intelecto. Hasta ahora, solamente él y unos pocos, saben por qué es la pelea con el presidente López Obrador.
Él sabe que el frío reciente del presidente inició por la intriga de Sheinbaum, que se limpió con él al perder nueve Alcaldías en la CDMX en 2021, con la excusa de que operó en contra, lo cual no sería raro, por rencores que guarda por arrebatarle esa posición con encuesta amañada.
Pero son más profundas las diferencias entre AMLO y Monreal. Es lo que se llama un animal político, de hecho, los dos lo son, pero solo se toleran. AMLO no soporta competencia interna. Así que el todavía líder de los senadores de Morena, sagaz como es, ya espera que una vez pasada la elección en Edomex y Coahuila, esperan tumbarlo, en el nuevo periodo de sesiones, que inicia en septiembre, pero ese zacatecano es de armas tomar y ya está preparado para esa pelea.
La división al interior de Morena no asusta a nadie, lo saben todos y es una separación natural por la enorme cantidad de tribus que solamente se unieron por y para AMLO. Monreal va por sus canicas; los va a enfrentar porque sabe que tiene seguidores, entre ellos a Cruz Pérez Cuéllar y muchos otros.
Es sabido que en Morena hay mucha gente que calla por miedo, pero no están de acuerdo con el presidente y el equipo de izquierda extrema que poco a poco se apoderó de los principales puestos cercanos al Jefe y ahora hasta engañan y tratan de manipularlo para heredar la candidatura, las siglas y, a través de Claudia o Adán, la candidatura y, de ganar, el poder en el país.
Monreal rechaza la idea de dividir a Morena, pero entiende que será inevitable que grupos tan disímbolos sigan juntos sin la figura que representa AMLO, pues solo lo reconocen a él como líder y eso lo sabe López Obrador; así que la lucha será total y los que ganen, esperan, con las siglas del movimiento, ganar la Presidencia.
Lo anterior, puede o no ser cierto, porque si la izquierda extremista gana, serían muy pocos e insuficientes para ganar. La gran mayoría es moderada o contraria a las ideas extremas de gente como Pablo Gómez, Claudia, Adán, o el barbaján de Bejarano y Padierna, su esposa, y ni se diga del peleador callejero de Fernández Noroña.
Insisto. Si los izquierdosos se quedan con Morena, Monreal entonces sí buscaría un acuerdo con la oposición para intentar unir a los cuatro partidos y juntos intentar ganar la Presidencia para formar un gobierno de coalición.
Cuando fue cuestionado por los periodistas, dijo que agradecía al PRD, pero sin decir que no, añadió: “Voy a seguir trabajando en Morena pero también platicaré con los demás líderes de los partidos de oposición. Tengo la firme decisión de ser candidato y de ser el presidente. México necesita seguir su proceso transformador pero de otro modo”.
Entonces afirma que va en la defensa del régimen de partidos políticos, porque esa es la democracia y México necesita de esos contrapesos políticos para seguir una ruta que garantice progreso. México no es ni debe ser país de un solo hombre.
Los críticos de AMLO, coinciden en que Monreal es uno de los que pueden sacar al buey de la barranca. Suceda o no lo que pretende, sus ideas coinciden con las de muchos mexicanos. Y si no surge en la oposición un buen o una buena candidata, pues, necesariamente voltearán hacia Monreal.
Posdata: Que la captura de Caro Quintero fue de pura suerte, por una patrulla de cinco marinos y que fue en Guachochi, a propósito del despliegue para agarrar al “Chueco” y que Caro bajó por la despensa, en descuido total, y le tocó, pero que a Chihuahua no le da AMLO ni agua, antes se la quita, así que se lo llevaron a Choix.
Yo insisto en que, desde arriba, le fue impuesta su entrega y que solamente fueron por él a Guachochi. Eso sí es cierto porque muchos decían que ahí estaba en la sierra. Pero darle crédito a Maru no entra en los planes del presidente, y si agarran al “Chueco” harán lo mismo, lo llevan a Sinaloa o Sonora; claro, si lo agarra la Marina, pero si lo agarra la policía de nuestro estado tragarán camote.