En un Juicio Oral, la Fiscalía General del Estado, a través de la Fiscalía Especializada de la Mujer, acreditó penalmente la culpabilidad del padre Aristeo Trinidad Baca Baca y/o Baca Olmos.
El día de hoy, un Tribunal de Enjuiciamiento, declaró al acusado culpable del delito de violación y abuso sexual agravado en perjuicio de una niña de entonces 8 años de edad.
Con pruebas testimoniales de al menos 20 testigos, peritajes oficiales y pruebas documentales, el Ministerio Público de la Unidad de Investigación de Delitos Sexuales de la FEM, acreditó que el procesado agredió sexualmente a la víctima al menos en tres ocasiones entre los años 2015 al 2018.
La evidencia presentada en juicio, indica que el imputado quebrantó la relación de confianza y se aprovechó del acceso que tenía con la víctima, quien se desempeñaba como monaguilla en la misma casa parroquial donde el imputado oficiaba misa.
Los hechos fueron denunciados en el año 2019, cuando la familia detectó el rechazo de la afectada hacia el padre y fue cuando finalmente decidió contar lo sucedido a su familia.
Dado el impacto psicológico y social que implica este caso, la Fiscalía Especializada de la Mujer en conjunto con la CEAVE mantienen en todo momento el acompañamiento y hacen patente su compromiso para procurar la justicia sin distingo de clase social o económica.
La audiencia para la individualización de la pena ser fijó el próximo 01 de marzo, cuando los jueces emitirán su veredicto en torno a la penalidad que deberá compurgar el acusado.
Por su parte, su abogado defensor el Lic. Maclovio Murillo declaró lo siguiente:
Se trata de una sentencia de primera instancia que no es definitiva y que será impugnada a través del recurso de apelación.
En su momento haremos valer los agravios que le ocasionan esa resolución al justiciable.
Aún contra la sentencia de apelación procede también el juicio de amparo directo ante tres Magistrados del Poder Judicial de la Federación.
Advertimos que la sentencia es jurídicamente incorrecta y en su momento solicitaremos que así lo declare un Tribunal de Apelaciones.
Confiamos en la inocencia del padre Aristeo Baca Baca y en que Dios le hará justicia en algún momento conforme su divina voluntad.